Putin: La Primera Guerra Mundial nos recuerda a qué lleva el exceso de ambición
Publicado: 1 ago 2014 | 11:06 GMT Última actualización: 1 ago 2014 | 13:39 GMT
© RIA Novosti Michael Klimentyev
Evocando la lección de la Primera Guerra Mundial, el presidente ruso, Vladímir Putin, recordó que "la violencia genera la violencia" y que el camino a la paz solo se construye a través del diálogo.
La tragedia de la Primera Guerra Mundial "nos recuerda a qué conduce la agresión y el egoísmo, el exceso de ambición de los jefes de Estado y las élites políticas, que prevalecen sobre el sentido común", expresó el líder ruso durante la inauguración de un monumento en Moscú a los héroes de la Gran Guerra.
"En vez de preservar el continente más próspero del mundo, Europa, lo ponen en peligro", dijo.
El presidente ruso subrayó que en la historia universal hay muchos ejemplos de qué "terrible precio" tiene la violación de los derechos y libertades de otras personas por intereses particulares y "falta de voluntad para escucharse el uno al otro".
"La humanidad debía haber aprendido y aceptado hace tiempo la verdad más importante: la violencia genera violencia y el camino hacia la paz y la prosperidad está en la buena voluntad y el diálogo, y el recuerdo de las lecciones de las guerras pasadas sobre quién las desató y para qué", afirmó.
A su juicio, el monumento a los héroes de la Primera Guerra Mundial "no es solo un homenaje a las grandes hazañas" sino también "una advertencia de que el mundo es frágil".
"En vez de preservar el continente más próspero del mundo, Europa, lo ponen en peligro", dijo.
El presidente ruso subrayó que en la historia universal hay muchos ejemplos de qué "terrible precio" tiene la violación de los derechos y libertades de otras personas por intereses particulares y "falta de voluntad para escucharse el uno al otro".
"La humanidad debía haber aprendido y aceptado hace tiempo la verdad más importante: la violencia genera violencia y el camino hacia la paz y la prosperidad está en la buena voluntad y el diálogo, y el recuerdo de las lecciones de las guerras pasadas sobre quién las desató y para qué", afirmó.
A su juicio, el monumento a los héroes de la Primera Guerra Mundial "no es solo un homenaje a las grandes hazañas" sino también "una advertencia de que el mundo es frágil".
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