El ejército de Congo recupera una ciudad con ayuda de milicianos Mai Mai
Las Fuerzas Armadas de la República Democrática de Congo (FARDC), apoyadas por los milicianos Mai Mai, recuperaron hoy la localidad de Sake, tomada ayer por los rebeldes del M23, tras intentos combates que se produjeron esta tarde, informaron fuentes locales.
"Las FARDC y los Mai Mai se enfrentaron en un intenso combate a los insurgentes del M23 y les obligaron a abandonar la localidad de Sake", dijo un corresponsal de la Radio Televisión del Grupo Avenir (RTGA).
"Los rebeldes del M23 están huyendo. Algunos van hacia Goma, otros hacia la localidad de Minova. La situación es confusa de momento en Goma", concretó.
Por otra parte, según el diario local "Le Palmares", que se publica en Kinshasa, militares angoleños han llegado hoy a Bukavu, en la provincia de Kivu del Sur, para prestar asistencia a las FARDC, una noticia confirmada por fuentes de la Presidencia congoleña.
Un miembro de la misión de las Naciones para la estabilización de la RDC (MONUSCO), basado en Bukavu, dijo bajo condición de anonimato que soldados procedentes de Zimbabue y Namibia han llegado ya a Bukavu y algunos de ellos están avanzando hacia la ciudad de Goma para sumarse a las FARDC y los Mai Mai.
Los rebeldes del M23 perdieron el control de Sake el mismo día que el presidente del su ala política, Jean-Marie Runiga, viajó a Kampala para abordar con el presidente de Uganda, Yoweri Museveni, el actual conflicto en la RDC.
Runiga partió hoy de Goma, la estratégica ciudad oriental tomada el pasado martes por los rebeldes, hacia la capital ugandesa a invitación de Museveni, informó el portavoz del M23, Amani Kabasha, a los periodistas en esa urbe congoleña.
El viaje del líder rebelde se produjo un día después de que el presidente ugandés se entrevistara con sus colegas de la RDC, Joseph Kabila, y Ruanda, Paul Kagame, para tratar la ofensiva del M23.
El M23 está formado por soldados congoleños amotinados y supuestamente fieles al rebelde Bosco Ntaganda, buscado por la Corte Penal Internacional (CPI) por crímenes de guerra y contra la humanidad.
Los rebeldes, que en los últimos días han intensificado su ofensiva, se sublevaron el pasado abril para protestar por la pérdida de poder que había impuesto el Ejecutivo de Kinshasa a su líder, y reclaman nuevas negociaciones con el Gobierno.
La RDC está inmersa aún en un frágil proceso de paz tras la segunda guerra del Congo (1998-2003), que implicó a varios países africanos, y tiene desplegada la mayor misión de paz de la ONU
"Los rebeldes del M23 están huyendo. Algunos van hacia Goma, otros hacia la localidad de Minova. La situación es confusa de momento en Goma", concretó.
Por otra parte, según el diario local "Le Palmares", que se publica en Kinshasa, militares angoleños han llegado hoy a Bukavu, en la provincia de Kivu del Sur, para prestar asistencia a las FARDC, una noticia confirmada por fuentes de la Presidencia congoleña.
Un miembro de la misión de las Naciones para la estabilización de la RDC (MONUSCO), basado en Bukavu, dijo bajo condición de anonimato que soldados procedentes de Zimbabue y Namibia han llegado ya a Bukavu y algunos de ellos están avanzando hacia la ciudad de Goma para sumarse a las FARDC y los Mai Mai.
Los rebeldes del M23 perdieron el control de Sake el mismo día que el presidente del su ala política, Jean-Marie Runiga, viajó a Kampala para abordar con el presidente de Uganda, Yoweri Museveni, el actual conflicto en la RDC.
Runiga partió hoy de Goma, la estratégica ciudad oriental tomada el pasado martes por los rebeldes, hacia la capital ugandesa a invitación de Museveni, informó el portavoz del M23, Amani Kabasha, a los periodistas en esa urbe congoleña.
El viaje del líder rebelde se produjo un día después de que el presidente ugandés se entrevistara con sus colegas de la RDC, Joseph Kabila, y Ruanda, Paul Kagame, para tratar la ofensiva del M23.
El M23 está formado por soldados congoleños amotinados y supuestamente fieles al rebelde Bosco Ntaganda, buscado por la Corte Penal Internacional (CPI) por crímenes de guerra y contra la humanidad.
Los rebeldes, que en los últimos días han intensificado su ofensiva, se sublevaron el pasado abril para protestar por la pérdida de poder que había impuesto el Ejecutivo de Kinshasa a su líder, y reclaman nuevas negociaciones con el Gobierno.
La RDC está inmersa aún en un frágil proceso de paz tras la segunda guerra del Congo (1998-2003), que implicó a varios países africanos, y tiene desplegada la mayor misión de paz de la ONU
No hay comentarios:
Publicar un comentario