El organismo lamenta la falta de acción que impera en el Consejo de Seguridad sobre la situación en Siria
La alta comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Navy Pillay, ha pedido hoy en la Asamblea General que la comunidad internacional actúe «urgentemente» para proteger a la población civil en Siria de los ataques «sistemáticos» del régimen de Bachar al Asad.«Todos y cada uno de los miembros de la comunidad internacional deben actuar ahora para proteger urgentemente a la población siria», ha dicho Pillay, quien ha asegurado que la ONU sigue sin poder actualizar en estos momentos la cifra de fallecidos por la represión en Siria y que el pasado enero situó en más de 5.400 muertos.
Además, ha lamentado la falta de acción del Consejo de Seguridad sobre la situación en Siria y ha asegurado que la Liga Árabe sí ha respondido «con determinación» para frenar la violencia, por lo que ha animado a los Estados miembros de Naciones Unidas a que apoyen los esfuerzos de esa organización regional. «Cuanto más tarde la comunidad internacional en tomar acciones, más sufrirá la población civil con las innumerables atrocidades que se cometen en su contra», ha dicho Pillay, quien ha asegurado que las autoridades sirias siguen adelante con su campaña de «disparar para matar» contra los manifestantes.
La represión continúa además con una «campaña masiva de arrestos», que ha llevado a la «detención arbitraria de miles de manifestantes y activistas, y también a la «desaparición forzada» de muchos de esos detenidos, según la alta comisionada. Además ha denunciado «el uso sistemático y extendido de torturas» en los centros de interrogación y detención de las fuerzas de seguridad, a las que ha acusado también de episodios de «violencia sexual» y de dirigir la represión también contra los menores, ya que unos 400 niños han muerto desde el inicio de la represión.
Las cifras presentadas por Pillay, quien ha insistido en que no han podido ser actualizadas, aseguran que en 2011 la represión en Siria se cobró más de 5.400 fallecidos, «entre manifestantes y militares que se negaron a matar a los manifestantes», y además todavía hay 18.000 personas detenidas por el régimen.
La alta comisionada ha reiterado que su oficina ha concluido que, desde marzo de 2011, cuando se iniciaron las protestas contra el régimen de Al Asad, se han producido «crímenes contra la humanidad» en Siria y ha animado de nuevo al Consejo de Seguridad a referir estos casos a la Corte Penal Internacional (CPI), al tiempo que ha alertado de la difícil situación que atraviesa la ciudad de Homs. «Todos los Estados miembros (de la ONU) deben dejar claro al Gobierno sirio que la violencia debe acabar ahora», ha asegurado Pillay, quien ha recordado a los 193 países del organismo que «los crímenes continúan» mientras se encuentran reunidos para analizar la situación en el país árabe.
Pillay ha participado en una sesión especial de la Asamblea General de la ONU sobre la situación en Siria, reclamada por varios países árabes, quienes trabajan en un proyecto de resolución que se presentará en ese órgano para condenar a Damasco y apoyar los esfuerzos de la Liga Árabe.Siria, apoyada por Irán y Corea del Norte, se ha opuesto formalmente a la celebración de la reunión de la Asamblea General y particularmente a la presencia de Pillay, ya que, según ha subrayado su embajador ante la ONU, Bashar Jafari, representa «una clara violación» del funcionamiento de ese órgano
Fuente Diario "ABC"
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La ONU acusa al régimen sirio del asesinato sistemático de civiles
El ministro de Exteriores reclama un alto el fuego como condición previa para el despliegue
La Asamblea General de Naciones Unidas debate sobre la crisis abierta en el país árabe
La alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, la sudafricana Navi Pillay, ha elevado de nuevo el tono para denunciar los crímenes cometidos por el régimen de Bachar el Asad, al que ha culpado de llevar a cabo una política sistemática trazada para acabar con la oposición civil. Pillay ha profundizado en la nota emitida la semana pasada y, esta vez desde el atril de la Asamblea de Naciones Unidas en Nueva York (vídeo en directo), ha manifestado que "la escala y naturaleza" de la represión del Gobierno sugieren que Damasco puede estar detrás de la comisión de "crímenes contra la humanidad". El Alto Comisionado para los Derechos Humanos calcula que solo el año pasado murieron a manos de las fuerzas de seguridad 5.400 personas. Pillay ha admitido que la represión contra los alzados ha alcanzado tal magnitud en el inicio de 2012 que es imposible cifrar las víctimas mortales.
La alta comisionada ha hecho especial hincapié en el "ataque indiscriminado" que las fuerzas militares han llevado a cabo en la provincia de Homs, corazón de la revuelta iniciada hace 11 meses. "El fracaso del Consejo de Seguridad para consensuar una acción firme colectiva ha envalentonado al Gobierno sirio para lanzar un asalto sin cuartel con el objetivo de aplastar a la disidencia con una fuerza sobrecogedora". Rusia, que cuenta en Siria con una base naval militar, vetó el pasado sábado 4 de febrero -junto con China- una resolución en el Consejo de Seguridad de la ONU que reclamaba a Bachar el Asad ceder el poder y establecía una hoja de ruta para una transición democrática. Pillay ha calculado que desde que comenzase la última ofensiva militar del régimen contra Homs, hace 10 días, al menos 300 personas han perdido la vida.
La responsable del máximo órgano de la ONU para los derechos humanos, que a través de un equipo independiente lleva investiga las atrocidades en Siria, ha ofrecido durante la intervención de apertura de la Asamblea General nuevas cifras: más de 18.000 arrestados de forma arbitraria, 25.000 refugiados que han abandonado el país, y 70.000 desplazados internos, además de miles de desaparecidos desde que la localidad de Deraa prendiese la mecha de la revuelta contra El Asad.
Desde el atril de la Asamblea General de la ONU, Pillay ha instado a la comunidad internacional a actuar "ahora". "Cuanto más tarde la comunidad internacional en actuar", ha señalado la alta comisionada, "más sufrirán los civiles las incontables atrocidades cometidas en su contra".
Una fuerza de paz
Mientras, la posible formación de una fuerza para el mantenimiento de la paz como forma para salir de la crisis sigue provocando las reacciones de diferentes cancillerías. Estados Unidos ha asegurado que está estudiando la propuesta de la Liga Árabe. El contingente tendría sentido si hubiera "una paz que mantener", algo que "desgraciadamente" no sucede en Siria, según el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney.
El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, ha informado asimismo este lunes de que su Gobierno está "estudiando" la idea para la creación de este contingente de Naciones Unidas y de la propia Liga para atajar la represión del régimen del presidente sirio, Bachar el Asad.
En una conferencia de prensa, Lavrov explicó en Moscú que el Gobierno ha pedido más detalles sobre la posible misión y ha reclamado un alto el fuego como condición previa necesaria para su creación. Asimismo, reiteró que la presión internacional para el fin de la violencia debe centrarse tanto en la oposición como en el Gobierno. Mientras tanto, las fuerzas gubernamentales siguen bombardeando los barrios sublevados de la ciudad de Homs.
"Esperamos que nuestros amigos árabes clarifiquen algunos aspectos", explicó Lavrov. "En primer lugar, para desplegar una fuerza de paz, es necesaria la autorización de la parte que la recibe. En segundo lugar, para que se pueda enviar una misión de mantenimiento de la paz, es necesario que haya una paz. Es decir, hace falta algo que se parezca a un alto el fuego". Algo muy difícil de lograr, según Lavrov, ya que "los grupos que combaten contra el régimen sirio no obedecen a nadie, no son controlados por nadie".
Un portavoz de la Unión Europea declaró que Bruselas respalda la iniciativa árabe. El responsable de Exteriores de Reino Unido, William Hague, precisó que, desde el punto de vista de Londres, en ningún caso la fuerza de paz debería estar compuesta por soldados occidentales. La mejor opción sería una fuerza compuesta por militares árabes, según Hague.
Por otra parte el ministro de Exteriores francés, Alein Juppé, ha declarado este lunes que cualquier acción militar extranjera en Siria solo empeoraría la situación tras la propuesta de la Liga Árabe de enviar una misión de paz liderada por los países árabes y Naciones Unidas. "Creemos que hoy cualquier intervención exterior de naturaleza militar solo empeoraría la situación, sobre todo teniendo en cuenta que no hay una decisión del Consejo de Seguridad, el único organismo que puede autorizar una intervención militar", ha afirmado el ministro.
El ministro de Exteriores ruso se pronunció también acerca de la iniciativa, atribuida a algunas capitales europeas, de convocar una conferencia de "amigos de Siria", que calificó de "positiva" siempre y cuando "sirva para unir a todos los sirios".
"Si se trata de una conferencia de amigos de la oposición siria, seguramente no contribuirá a conseguir los objetivos planteados por la Liga Árabe sobre la necesidad de abrir un diálogo nacional inclusivo, que nosotros apoyamos activamente", dijo Lavrov.
Halladas nuevas fosas comunes en las cercanías de Homs
El Ejército sirio extiende su ofensiva a las localidades cercanas a la ciudad rebelde
Es un agujero cavado en medio del campo de seis metros por cuatro, en las inmediaciones de Al Qusayr. En los extremos, yacen al menos cuatro cuerpos visibles de seres humanos, el más destapado bocabajo, con las manos atadas en la espalda y una cuerda en los pies. A un lado, sólo asoma una cabeza, una pierna, o un brazo entre la tierra mojada. En el centro, algunos huesos humanos y una dentadura revelan que puede haber algún otro cadáver. Los hombres, vestidos de civil, presentan recientes signos de descomposición, aunque sus rostros son irreconocibles. La fosa se encuentra junto a una carretera rural, al paso de los camiones y las motocicletas de los lugareños, separada del tránsito por un montón de tierra.
Ni los activistas sirios ni el Ejército libre quiere responder a las preguntas acerca de quienes son las personas abandonadas en ese lugar, ni tampoco han recogido los cuerpos para tratarlos como a los saheed, los mártires asesinados por las tropas de Bachar el Asad, que suelen ser tratados como héroes, con un funeral al que acuden muchos vecinos y enterrados en un cementerio improvisado, al abrigo de los disparos de algunos de los veinte francotiradores que quedan apostados en los edificios de la ciudad. Si no son de la ciudad, son llevados a un frigorífico y se busca a sus familiares. Se trata de la segunda fosa común hallada en estos alrededores, la semana pasada se encontraron los restos de otras cinco personas en la provincia de Homs, grabados en un vídeo por un habitante de Al Qusayr.
El Ejército Libre ha tomado algunas posiciones en esta localidad durante la semana pasada, la más importante el cuartel general de la Seguridad Nacional de los mujabarat (servicios secretos sirios), donde murieron cinco personas que se hallaban en su interior. “Hay cuatro tanques que se están aproximando por el norte, desde Homs”, explica Kasim, responsable de la resistencia en la ciudad. Ayer domingo fueron avistados siete vehículos de las fuerzas de El Asad a esta localidad, de 40.000 habitantes, según fuentes del Ejército Libre.
La población sufre cortes de luz y escasea el fuel. El domingo por la mañana los Suwar, el contingente de civiles que ayuda al Ejército Libre en la tarea de distribuir suministros para la población, repartía fuel con una furgoneta, rodeada de hombres y mujeres con billetes en las manos. "No queda prácticamente nada, no podemos poner la calefacción”, explica Mohamed, uno de las personas que hace cola para poder llenar la garrafa blanca que lleva en las manos. "Estamos muy asustados. Igual quieren hacer igual que en Homs", confiesa Hana, con el rostro preocupado ante las noticias del avance de las tropas de Al Asad.
En esta localidad mueren una o dos personas al día. La familia de Abu Kasem, 63 años, ha sufrido la pérdida de dos de sus hijos, Ahsraf Zhori, de 26 años y graduado en matemáticas, y Yathreb Zhori, de 29, un médico que cursó sus estudios en Arabia Saudi. "Siempre iban a las manifestaciones, así que estaban en la lista negra", explica Abu Khasem. Cuando murieron, mi hija Suriya estaba al teléfono hablando con Ashraf, al que habían disparado y estaba malherido. Durante la conversación escuchó que un soldado de El Asad preguntaba al superior: aquí hay uno vivo, y el superior dijo: 'mátale'. Mi hija lo escuchó todo ».
Dos fotografías gran tamaño de los dos shaheed presiden la estancia, cuidadosamente colocadas sobre dos sillones al fondo del salón, en la entrada de la casa. "Estamos muy contentos porque Allah nos ha dado dos mártires", dice con una sonrisa. A su lado, Eva Zahir, de ascendencia española, rompe a llorar. Abu Kasem no puede contener las lágrimas al ver a su mujer y estalla en un llanto incontenible, tapándose los ojos con el brazo. Cuando se recompone, habla. "Vosotros tuvisteis a Franco, sabéis lo que es una dictarura. Aquí también queremos libertad", susurra.
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Washington promete hacer todo lo posible para aislar al régimen de Asad
La titular de Exteriores se compromete a aumentar la presión diplomática
El portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, ha asegurado que Estados Unidos hará todo lo posible para aislar y presionar al régimen sirio de Bachar el Asad, al tiempo que abogó por mantener la cooperación con sus aliados internacionales.
La Casa Blanca criticó los "desagradables actos de violencia" perpetrados por el régimen sirio sobre su pueblo, "que sólo busca una transición democrática y una vida mejor".
Carney dijo que Estados Unidos aún confía en que la presión sobre Siria permita "un cambio de comportamiento" de las autoridades del país árabe, mientras que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas no ha conseguido aprobar una resolución para frenar la represión en Siria.
La secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, también lamentó los informes sobre nuevos bombardeos en la ciudad siria de Homs, en una conferencia de prensa tras reunirse con el ministro de Exteriores turco, Ahmed Davutoglu.
"Es deplorable que el régimen haya intensificado la violencia en ciudades de todo el país, incluyendo el uso de artillería y los disparos desde tanques contra civiles inocentes", dijo Clinton.
La titular de exteriores se comprometió junto a Davotuglu a "intensificar la presión diplomática" contra el régimen de Al Asad, y celebró la decisión de la Liga Árabe de celebrar en próximo 24 de febrero una conferencia internacional de "Amigos de Siria", una fuerza de paz conjunta con la ONU.
La alta comisionada de Derechos Humanos de Naciones Unidas, Navi Pillay, denunció hoy que la falta de acción del Consejo de Seguridad ha servido para "envalentonar" al régimen de Damasco a aumentar la represión sobre civiles.
La Casa Blanca volvió a pedir a Al Asad que deje el poder y permita que se produzca una transición democrática, mientras que dijo que Washington apoyaría la misión de paz en Siria que propone la Liga Árabe.
"Como principio general, nosotros apoyaríamos una misión de la Liga Árabe ampliada, incluido con el apoyo de Naciones Unidas u otros. Estamos hablando con la Liga Árabe, la ONU y nuestros aliados sobre las circunstancias de una misión para mantener la paz", indicó Carney.
No obstante, el portavoz matizó que por el momento no hay una paz que defender, ya que no se ha producido un cese de las hostilidades y prefirió no especular sobre una participación de tropas estadounidenses en una posible misión de este tipo.
Asimismo, Carney recordó que hay grandes diferencias entre la situación en Siria y la que se dio en Libia, ya que hubo una resolución de Naciones Unidas para imponer una zona de exclusión, apoyo de la Liga Árabe, mientras que la disidencia libia pedía una intervención.
Fuente Diario "EL MUNDO"
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DENUNCIA «EL USO SISTEMÁTICO Y EXTENDIDO DE TORTURAS»
La ONU pide actuar «urgentemente» para proteger a los civiles en Siria
La alta comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Navy Pillay, ha pedido hoy en la Asamblea General que la comunidad internacional actúe "urgentemente" para proteger a la población civil en Siria de los ataques "sistemáticos" del régimen
Además, ha lamentado la falta de acción del Consejo de Seguridad sobre la situación en Siria y ha asegurado que la Liga Árabe sí ha respondido "con determinación" para frenar la violencia, por lo que ha animado a los Estados miembros de Naciones Unidas a que apoyen los esfuerzos de esa organización regional.
"Cuanto más tarde la comunidad internacional en tomar acciones, más sufrirá la población civil con las innumerables atrocidades que se cometen en su contra", ha dicho Pillay, quien ha asegurado que las autoridades sirias siguen adelante con su campaña de "disparar para matar" contra los manifestantes.
La represión continúa además con una "campaña masiva de arrestos", que ha llevado a la"detención arbitraria de miles de manifestantes y activistas", y también a la "desaparición forzada" de muchos de esos detenidos, según la alta comisionada.
Además ha denunciado "el uso sistemático y extendido de torturas" en los centros de interrogación y detención de las fuerzas de seguridad, a las que ha acusado también de episodios de"violencia sexual" y de dirigir la represión también contra los menores, ya que unos 400 niños han muerto desde el inicio de la represión.
Las cifras presentadas por Pillay, quien ha insistido en que no han podido ser actualizadas, aseguran que en 2011 la represión en Siria se cobró más de 5.400 fallecidos, "entre manifestantes y militares que se negaron a matar a los manifestantes", y además todavía hay 18.000 personas detenidas por el régimen.
La alta comisionada ha reiterado que su oficina ha concluido que, desde marzo de 2011, cuando se iniciaron las protestas contra el régimen de Al Asad, se han producido "crímenes contra la humanidad" en Siria y ha animado de nuevo al Consejo de Seguridad a referir estos casos a la Corte Penal Internacional (CPI), al tiempo que ha alertado de la difícil situación que atraviesa la ciudad de Homs.
"Todos los Estados miembros (de la ONU) deben dejar claro al Gobierno sirio que la violencia debe acabar ahora", ha asegurado Pillay, quien ha recordado a los 193 países del organismo que "los crímenes continúan" mientras se encuentran reunidos para analizar la situación en el país árabe.
Pillay ha participado en una sesión especial de la Asamblea General de la ONU sobre la situación en Siria, reclamada por varios países árabes, quienes trabajan en un proyecto de resolución que se presentará en ese órgano para condenar a Damasco y apoyar los esfuerzos de la Liga Árabe.
Siria, apoyada por Irán y Corea del Norte, se ha opuesto formalmente a la celebración de la reunión de la Asamblea General y particularmente a la presencia de Pillay, ya que, según ha subrayado su embajador ante la ONU, Bashar Jafari, representa "una clara violación" del funcionamiento de ese órgano. ar al Asad.
Fuente Diario "LA RAZÓN"
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