Los 'diputados' doceañistas regresan a Cádiz dos siglos después para preparar La Pepa
El brote de fiebre amarilla había ya desaparecido y la capital gaditana volvía a ser segura. Los diputados reunidos y residentes en La Isla de León deciden regresar a Cádiz para constituirse en Cortes. Era el lugar más aseguro para sobrevivir al asedio francés protegidos por las murallas de la capital gaditana.
Era el 20 de febrero de 1811 y como hace 200 años, al mediodía de este domingo los 'diputados' doceañistas han anunciado a las puertas de la Iglesia Mayor de San Fernando que hacían efectivo su traslado a Cádiz. Ataviados con vestidos de época y con todo el boato de las celebraciones históricas, figurantes y voluntarios han iniciado su camino hacia la capital, donde les esperaban los alcaldes de San Fernando y Cádiz, Manuel María de Bernardo y Teófila Martínez, respectivamente, además de los miembros del Consorcio para el Bicentenario de la Constitución de 1812.
A los pies del Monumento a Las Cortes, en la gaditana Plaza de España, inaugurado en 1912 con motivo del primer centenario de La Pepa, los regidores municipales han recordado la hazaña de aquellos diputados doceañistas, a los que hoy representan algunos de sus descendientes. El acto ha servido, además, como sentido homenaje a los que se quedaron en el camino y perdieron la vida por las libertades.
Manuel María de Bernardo ha recordado que durante cinco meses, "en la isla se ofició el decreto de Estado moderno y el nacimiento de una nueva era donde se estableció la soberanía nacional, la separación de poderes y la transición de súbditos a ciudadanos". Ha añadido que los isleños, y por ende los gaditanos, mantienen "con orgullo su aportación al Estado moderno".
Teófila Martínez, por su parte, ha incidido en que "si San Fernando fue el baluarte invencible, Cádiz fue ciudad de libertades".
Los 'diputados' doceañistas han sido recibidos con un desfile a cargo de la Asociación de Voluntarios Distinguidos de Cádiz, la Guardia Salinera de La Isla y la Unidad de Banda de Música de Época. La capital toma ahora el relevo en la celebración de los grandes actos del Bicentenario de la Constitución de 1812, a poco más de un año de la conmemoración.
Ahora, los diputados ya están en Cádiz, los gaditanos no se rendirán al asedio gabacho y en España no se hablará francés, como todavía hoy se bromea en la ciudad: "Si no hubiera sido por los gaditanos hoy no estaríamos hablando en español".
Fuente Diario "EL MUNDO"
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