OPERACIÓN ZITADELLE. LA BATALLA DE KURSK
ÍNDICE
- Antecedentes (Inicio)
- Orden de batalla
- Fuerzas alemanas
- Fuerzas soviéticas - Ejércitos enfrentados
- Alemania
- Unión Soviética - Planes para la batalla
- Alemania
- Unión Soviética - La batalla de Kursk
- Zona norte del saliente
- Zona sur del saliente. La batalla de Prokhorovka - Consecuencias. Balance de la batalla
- Galería fotográfica
- Fuentes
Situación del frente antes de la batalla de Kursk
1. Antecedentes (Inicio)
El saliente de Kursk fué el resultado de las batallas de invierno y primavera de 1943 en sur del Frente Oriental.
Después de que los soviéticos rodearan Stalingrado y forzaran la retirada alemana del Caúcaso, su ofensiva no se detuvo y continuó hacia el oeste en dirección a los ríos Don y Dnieper. Importantes ciudades como Rostov y Kharkov fueron reconquistadas. Sin embargo, el Ejército Rojo se extendió demasiado en sus líneas y las tropas alemanas capitaneadas por el Mariscal Erich von Manstein (comandante en jefe del Grupo de Ejércitos del Don) contraatacaron a finales del mes de febrero de 1943. La respuesta alemana destruyó a muchas unidades soviéticas y se volvieron a conquistar grandes porciones de territorio que los soviéticos habían tomado con anterioridad. Kharkov fue retomada por los alemanes después de una dura lucha, pero el deshielo que hizo casi imposible las operaciones y la dura resistencia soviética hicieron que la contraofensiva de von Manstein se detuviera en las afueras de la capturada ciudad de Belgorod.
Con el final de la contraofensiva alemana (finales de marzo de 1943), que fue todo un éxito, se había reconquistado casi toda el área de Kharkov y se habían destruido la mayor parte de las fuerzas soviéticas en el frente.
El frente se estabilizó y ambos ejércitos se prepararon para los combates del verano. El tablero para la batalla de Kursk quedaba dispuesto.
Después de que los soviéticos rodearan Stalingrado y forzaran la retirada alemana del Caúcaso, su ofensiva no se detuvo y continuó hacia el oeste en dirección a los ríos Don y Dnieper. Importantes ciudades como Rostov y Kharkov fueron reconquistadas. Sin embargo, el Ejército Rojo se extendió demasiado en sus líneas y las tropas alemanas capitaneadas por el Mariscal Erich von Manstein (comandante en jefe del Grupo de Ejércitos del Don) contraatacaron a finales del mes de febrero de 1943. La respuesta alemana destruyó a muchas unidades soviéticas y se volvieron a conquistar grandes porciones de territorio que los soviéticos habían tomado con anterioridad. Kharkov fue retomada por los alemanes después de una dura lucha, pero el deshielo que hizo casi imposible las operaciones y la dura resistencia soviética hicieron que la contraofensiva de von Manstein se detuviera en las afueras de la capturada ciudad de Belgorod.
Con el final de la contraofensiva alemana (finales de marzo de 1943), que fue todo un éxito, se había reconquistado casi toda el área de Kharkov y se habían destruido la mayor parte de las fuerzas soviéticas en el frente.
El frente se estabilizó y ambos ejércitos se prepararon para los combates del verano. El tablero para la batalla de Kursk quedaba dispuesto.
16 de Febrero de 1943. Tropas soviéticas en la recién conquistada Kharkov
Apenas un mes después, la tropas alemanas reconquistan la ciudad de Kharkov. En la imagen unidades de granaderos panzer de la 2ª SS Pz. Div. Das Reich
2. Orden de batalla
- Fuerzas alemanas
GRUPO DE EJÉRCITOS CENTRO (Mariscal Von Kluge)
9º Ejército (Coronel-General Model)
XX Cuerpo de Ejército (General de Infantería Freiherr Von Roman)
-45ª Div. Inf. (Gen. Inf. Freiherr von Falkenstein)
-72ª Div. Inf. (Teniente General Müller-Gebhard)
-137ª Div. Inf. (Tte. Gen. Karnecke)
-251ª Div. Inf. (Gen. Div. Feizmann)
XLVI Cuerpo Panzer (Gen. Inf. Zorn)
-7ª Div. Inf. (Tte. Gen. Von Rappard)
-31ª Div. Inf. (Tte. Gen. Hossbach)
-102ª Div. Inf. (Gen. Div. Hitzfeld)
258ª Div. Inf. (Tte. Gen. Hocker)
XLVIII Cuerpo Panzer (General der Panzertrüppen Lemelsen)
-2º Pz. Div. (Tte. Gen. Lübbe)
-6ª Div. Inf. (Tte. Gen. Grossmann)
-9ª Pz. Div. (Tte. Gen. Scheller)
-20ª Pz. Div. (Gen. Div. Von Kessel)
XLI Cuerpo Panzer (Gen. PzTr. Harpe)
-18ª Pz. Div. (Gen. Div. Von Schieben)
-86ª Div. Inf. (Tte. Gen. Weidling)
-292ª Div. Inf. (Tte. Gen. Von Kluge)
XXIII Cuerpo de Ejército (Gen. Inf. Freissner)
-78ª Sturm Div. (Tte. Gen. Traut)
-216ª Div. Inf. (Gen. Div. Schack)
-383ª Div. Inf. (Gen. Div. Hoffmeister)
Luftflotte VI (Col. Gen. Von Greim)
-I Fliegerkorps (Tte. Gen. Deichmann)
GRUPO DE EJÉRCITOS SUR ( Mariscal Von Manstein)
Destacamento de Ejército de Kempf (Gen. PzTr. Kempf)
XI Cuerpo de Ejército (Gen. PzTr. Raus)
-106ª Div. Inf. (Tte. Gen. Forst)
-320ª Div. Inf. (Gen. Div. Postel)
XLII Cuerpo de Ejército (Gen. Inf. Mattenklott)
-39ª Div. Inf. (Tte. Gen. Loenweneck)
-161ª Div. Inf. (Tte. Gen. Recke)
-282ª Div. Inf. (Gen. Div. Köhler)
III Cuerpo Panzer (Gen. PzTr. Breith)
-6ª Pz. Div. (Gen. Div. Von Hunnersdorf)
-7ª Pz. Div. (Tte. Gen. Freiherr von Funck)
-19ª Pz. Div. (Tte. Gen. Schmidt)
-168ª Div. Inf. (Gen. Div. De Beaulieu)
4º Ejército Panzer (Col. Gen. Hoth)
II SS Cuerpo Panzer (Obergruppenführer SS Hausser)
-1ª SS Pz. Gran. Div. Leibstandarte Adolf Hitler (Brigadeführer Wisch)
-2ª SS Pz. Gran. Div. Das Reich (Gruppenführer Krüger)
-3ª SS Pz. Gran. Div Totenkopf (Brigadeführer Priess)
XLVIII Cuerpo Panzer (Gen. PzTr. Von Knobelsdorff)
-3ª Pz. Div. (Tte. Gen. Westhoven)
-11ª Pz. Div. (Gen. Div. Mickl)
-167ª Div. Inf. (Tte. Gen. Trierenberg)
-Div. Pz. Gran. Grossdeutschland (Tte. Gen. Hoernlein)
LII Cuerpo de Ejército (Gen. Div. Ott)
-57ª Div. Inf. (Gen. Div. Fretter-Pico)
-255ª Div. Inf. (Tte. Gen. Poppe)
-332ª Div. Inf. (Tte. Gen. Schaefer)
Luftflotte IV (Gen. Dessloch)
Erich von Manstein
Hermann Hoth
Walther Model
Werner Kempf
-Fuerzas soviéticas
Stalin
STAVKA
Representantes del STAVKA en la Batalla de Kursk
Mariscal Zhukov y Mariscal Vasilevsky
FRENTE CENTRAL (Gen. Ejército. K.R. Rokossovsky)
-48º Ejército (Tte. Gen. Romanenko)
-13º Ejército (Tte. Gen. Pujov)
-70º Ejército (Tte. Gen. Galanin)
-65º Ejército (Tte. Gen. Batov)
-60ª Ejército (Tte. Gen. Chernyakhovsky)
-2º Ejército de Carros (Tte. Gen. Rodin)
-16º Ejército Aéreo (Mariscal Rudenko)
FRENTE DE LA ESTEPA (Col. Gen. I.S. Konev)
-5º Ejército de la Guardia (Tte. Gen. Zhadov)
-5º Ejército de Carros de la Guardia (Tte. Gen. Rotmistrov)
-27º Ejército (Tte. Gen. Trofimenko)
-47º Ejército (Tte. Gen. Ryzhov)
-53º Ejército (Tte. Gen. Mangarov)
-5º Ejército Aéreo (Col. Gen. Goryunov)
FRENTE DE VORONEZH (Gen. Del Ejército N.F. Vatutin)
-38º Ejército (Tte. Gen. N. Chibisov)
-40º Ejército (Tte. Gen. Moskalenko)
-1er Ejército de Carros (Tte. Gen. Katukov)
6º Ejército de la Guardia (Tte. Gen. Chistyakov)
7º Ejército de la Guardia (Tt. Gen. Shumilov)
2º Ejército Aéreo (Mariscal Krasovski)
Georgy Zhukov
Ivan Konev
Konstantin Rokossovsky
Nikolai Vatutin
3. Ejércitos enfrentados
- Alemania
Desde el final de las operaciones del invierno de 1942-1943, hasta el comienzo de la ofensiva en Kursk (Operación Ciudadela /Unternehmen Zitadelle), el Ejército alemán (Heer) fue recomponiéndose de material y hombres hasta alcanzar un nivel preparación nunca visto anteriormente en el Ostfront. Sin embargo existían ciertas debilidades en los preparativos de la batalla que tendrían un impacto importante en el posterior desarrollo de la batalla de Kursk.
A pesar de las derrotas del invierno anterior, el Heer se mantenía cohesionado. Las pérdidas en material y hombres fueron terribles. Una de las principales debilidades se encontraba en la escasez de hombres para enviar a las divisiones de infantería. Muchas de las bajas sólo podían ser reemplazadas con hombres trabajadores que dejarían sus ocupaciones para los trabajadores extranjeros. Las divisiones de infantería alemanas de 1943 fueron reducidas a 9 batallones (antes 16), lo que hacía que sus efectivos fueran de unos 12.277 hombres, mientras en 1939 y 1940 dichas unidades estaban formadas por unos efectivos de 17.734 hombres. A pesar de su gran potencia de fuego, la escasez en infantería iba a provocar que algunas unidades acorazadas fueran requeridas para realizar tareas que normalmente eran propias de las divisiones de infantería.
En enero de 1943, el Heer tenía sólo 495 tanques en todo el inmenso frente, la gran mayoría Panzer III (obsoletos) y Panzer IV (muchos de ellos con el cañón largo de 75 mm). Sólo unos pocos de los nuevos Tiger I con su letal cañón de 8.8 cm estaban en servicio en aquella fecha. Gracias al esfuerzo conjunto del Ministro de Armamentos Albert Speer y del Inspector Jefe de las Fuerzas Acorazadas, Col. Gen. Heinz Guderian, las fuerzas acorazadas germanas alcanzaron una cifra 2.700 carros y cañones de asalto al comienzo de la Operación Ciudadela. Todo esto en un frente de 100 km de ancho (Hitler había desplegado 3.332 carros para invadir la Unión Soviética en junio de 1941 en un frente de más de 1500km).
El grueso de los carros en Kursk eran los ya conocidos Panzer III y IV. Sin embargo se pusieron muchas esperanzas en los nuevos Tiger, Panther y el cazacarros pesado Ferdinand.
El Tiger ya había adquirido una enorme fama en anteriores combates, a pesar de sus inicios poco prometedores, su letal cañón de 8,8 cm hacía estragos entre los carros soviéticos. Durante la batalla de Kursk, el número de Tiger disponibles fue bajo. El 9º Ejército de Model sólo contaba con dos compañías de 14 Tiger cada una en el 505º Schwere Panzer-Abteilung (batallón de carros pesados) . En el Grupo de Ejércitos Sur había una unidad independiente, el 503 Schwere Panzer-Abteliung con 45 Tiger, más una compañía en cada una de las tres divisiones Panzer de la SS y otra en la Grossdeutschland. El total sumaba 102 Tiger en el frente de Kursk.
A pesar de las derrotas del invierno anterior, el Heer se mantenía cohesionado. Las pérdidas en material y hombres fueron terribles. Una de las principales debilidades se encontraba en la escasez de hombres para enviar a las divisiones de infantería. Muchas de las bajas sólo podían ser reemplazadas con hombres trabajadores que dejarían sus ocupaciones para los trabajadores extranjeros. Las divisiones de infantería alemanas de 1943 fueron reducidas a 9 batallones (antes 16), lo que hacía que sus efectivos fueran de unos 12.277 hombres, mientras en 1939 y 1940 dichas unidades estaban formadas por unos efectivos de 17.734 hombres. A pesar de su gran potencia de fuego, la escasez en infantería iba a provocar que algunas unidades acorazadas fueran requeridas para realizar tareas que normalmente eran propias de las divisiones de infantería.
En enero de 1943, el Heer tenía sólo 495 tanques en todo el inmenso frente, la gran mayoría Panzer III (obsoletos) y Panzer IV (muchos de ellos con el cañón largo de 75 mm). Sólo unos pocos de los nuevos Tiger I con su letal cañón de 8.8 cm estaban en servicio en aquella fecha. Gracias al esfuerzo conjunto del Ministro de Armamentos Albert Speer y del Inspector Jefe de las Fuerzas Acorazadas, Col. Gen. Heinz Guderian, las fuerzas acorazadas germanas alcanzaron una cifra 2.700 carros y cañones de asalto al comienzo de la Operación Ciudadela. Todo esto en un frente de 100 km de ancho (Hitler había desplegado 3.332 carros para invadir la Unión Soviética en junio de 1941 en un frente de más de 1500km).
El grueso de los carros en Kursk eran los ya conocidos Panzer III y IV. Sin embargo se pusieron muchas esperanzas en los nuevos Tiger, Panther y el cazacarros pesado Ferdinand.
El Tiger ya había adquirido una enorme fama en anteriores combates, a pesar de sus inicios poco prometedores, su letal cañón de 8,8 cm hacía estragos entre los carros soviéticos. Durante la batalla de Kursk, el número de Tiger disponibles fue bajo. El 9º Ejército de Model sólo contaba con dos compañías de 14 Tiger cada una en el 505º Schwere Panzer-Abteilung (batallón de carros pesados) . En el Grupo de Ejércitos Sur había una unidad independiente, el 503 Schwere Panzer-Abteliung con 45 Tiger, más una compañía en cada una de las tres divisiones Panzer de la SS y otra en la Grossdeutschland. El total sumaba 102 Tiger en el frente de Kursk.
Tiger I avanzando frente a una aldea en llamas
El Panther demostraría ser un excelente carro medio (quizás el mejor carro construido en la Segunda Guerra Mundial), sin embargo su precipitado debut en la batalla de Kursk, unido a sus problemas de transmisión, hizo que su debut no fuera todo lo bueno que se hubiera esperado. Para el 5 de Julio (día del inicio de la Operación Ciudadela) había suficientes Panther disponibles para equipar un batallón de la Grossdeutschland, y dos más del ejército que unidos formarían la Panzer-Brigade 10.
Panther avanzando por el sector de Butovo
El Ferdinand era un imponente cazacarros pesado de 68 toneladas armado con un impresionante cañón de 88 mm y con un blindaje frontal de 200 mm. A pesar de ello tenía graves defectos como su velocidad y su falta de una ametralladora para su defensa en proximidad. 90 de estos vehículos sirvieron en Kursk dentro del 9º Ejército.
Cazacarros Ferdinand
Una serie de nuevos vehículos aparecieron en Kursk. Entre ellos estaba el Brummbär, un cañón de asalto de infantería que llevaba un obús de 150 mm. 66 fueron enviados all Sturmpanzerabteilung 216, perteneciente al 9º Ejército. El Nashorn, un cazacarros armado con un cañón anticarro de 88 mm y los obuses autopropulsados Nashorn y Wespe hicieron su debut durante la Operación Ciudadela.
El Brummbär (oso gris) se estrenó en Kursk. Se trataba de un cañón autopropulsado, fuertemente armado y blindado, diseñado para destruir fortificaciones.
La Wehrmacht había concentrado junto a estas fuerzas unos 10.000 cañones y morteros.
Las tropas del Heer en el saliente de Kursk estaban dispuestas de la siguiente forma: El 9º Ejército de Model contaba con aproximadamente 340.000 hombres dispuestos en la zona norte del saliente y controlaba 21 divisones (6 acorazadas, una de granaderos Panzer y 14 de infantería) Cotaba con 590 tanques y 420 cañones de asalto. En la zona sur del saliente se encontraba el 4º Ejército Panzer de Hoth que disponía entre otras fuerzas de 9 divisiones Panzer, entre ellas la Grossdeutschland y el II SS Cuerpo Panzer con las poderosas Leisbstandarte, Das Reich y Totenkopf. En total sumaban aproximadamente 250.000 hombres y 1.100 carros y cazacarros. A la izquierda de esta impresionante unidad estaba el llamado Destacamento de Kempf con 10 divisiones entre ellas las veteranas 6ª, 7ª y 19ª Divisiones Panzer con un total de 299 tanques, además del 503 Schwere Panzer Abteilung . El total aproximado de las fuerzas del Heer en julio de 1943 en el saliente era de unos 900.000 hombres, 2.700 carros y cañones de asalto y 10.000 piezas de artillería y morteros.
En el aire la Luftwaffe había reunido en julio de 1943 unos 1.800 aviones de todo tipo, lo cual eran unos dos tercios del total disponible en el Frente Oriental. La Luftflotte VI apoyaría al 9º Ejército al norte del saliente, mientras la Luftflotte IV apoyaría a las fuerzas de Manstein al sur del saliente. En los aeródromos de Orel, Belgorod y Kharkov estaban agrupados los Heinkel He 111 y los Junkers Ju 88 de las KG 3, 27 y 55; los cazas saldrían de las JG 51, 52 y 54, y se trataba de aviones tipo Focke-Wulf Fw 190 A-5 y Messerschmitt Bf 109 G-6. De especial importancia, fue el despliegue en masa de la Schlachtgeschwader (alas de asalto) equipadas con los Fw 190 y los Henschel Hs 129. La Operación Ciudadela fue la última ocasión en la que pudieron verse a los Stukagruppen en su clásico papel de bombardeo en picado. Muchos de estos Stuka, concretamente el modelo Ju 87G-1 estaban armados con dos cañones de 37 mm (uno bajo cada ala) que fueron muy eficaces en la lucha contra los carros soviéticos.
Las tropas del Heer en el saliente de Kursk estaban dispuestas de la siguiente forma: El 9º Ejército de Model contaba con aproximadamente 340.000 hombres dispuestos en la zona norte del saliente y controlaba 21 divisones (6 acorazadas, una de granaderos Panzer y 14 de infantería) Cotaba con 590 tanques y 420 cañones de asalto. En la zona sur del saliente se encontraba el 4º Ejército Panzer de Hoth que disponía entre otras fuerzas de 9 divisiones Panzer, entre ellas la Grossdeutschland y el II SS Cuerpo Panzer con las poderosas Leisbstandarte, Das Reich y Totenkopf. En total sumaban aproximadamente 250.000 hombres y 1.100 carros y cazacarros. A la izquierda de esta impresionante unidad estaba el llamado Destacamento de Kempf con 10 divisiones entre ellas las veteranas 6ª, 7ª y 19ª Divisiones Panzer con un total de 299 tanques, además del 503 Schwere Panzer Abteilung . El total aproximado de las fuerzas del Heer en julio de 1943 en el saliente era de unos 900.000 hombres, 2.700 carros y cañones de asalto y 10.000 piezas de artillería y morteros.
En el aire la Luftwaffe había reunido en julio de 1943 unos 1.800 aviones de todo tipo, lo cual eran unos dos tercios del total disponible en el Frente Oriental. La Luftflotte VI apoyaría al 9º Ejército al norte del saliente, mientras la Luftflotte IV apoyaría a las fuerzas de Manstein al sur del saliente. En los aeródromos de Orel, Belgorod y Kharkov estaban agrupados los Heinkel He 111 y los Junkers Ju 88 de las KG 3, 27 y 55; los cazas saldrían de las JG 51, 52 y 54, y se trataba de aviones tipo Focke-Wulf Fw 190 A-5 y Messerschmitt Bf 109 G-6. De especial importancia, fue el despliegue en masa de la Schlachtgeschwader (alas de asalto) equipadas con los Fw 190 y los Henschel Hs 129. La Operación Ciudadela fue la última ocasión en la que pudieron verse a los Stukagruppen en su clásico papel de bombardeo en picado. Muchos de estos Stuka, concretamente el modelo Ju 87G-1 estaban armados con dos cañones de 37 mm (uno bajo cada ala) que fueron muy eficaces en la lucha contra los carros soviéticos.
Stuka, Junker 87G-1 en un aeródromo en la estepa
- Unión Soviética
A partir de las victorias invernales en el Ejército Rojo creció un sentimiento de profesionalismoo y renacimiento moral que iba aparejado con el tamaño y la fuerza del ejército. Mientras los efectivos de la Wehrmacht menguaban, en el Ejército Rojo había un total de 16.442.000 miembros en Julio de 1943. Muchas unidades fueron reorganizadas en cuerpos, divisiones y regimientos de Guardias, al estilo zarista.
De los 9.918 carros disponibles, una tercera parte eran ligeros, obsoletos para participar en un moderno campo de batalla. La producción soviética de carros había sido reducida a unos pocos modelos desde el comienzo de la guerra. Hacia 1943, las fábricas soviéticas estaban produciendo carros a una velocidad que doblaba a la alemana. Además se habían ido mejorando los modelos con lo que se contaban.
Se decidió renover el T-34/76 con un cañón de 85 mm, sin embargo este nuevo modelo no estaría listo para participar en Kursk. La mayoría de los carros soviéticos durante la batalla de Kursk fueron del modelo T-34/76. Se contaban aún con algunos modelos del carro pesado KV-1 y del ligero T-70 que participaría en la batalla en gran cantidad. También participaron en Kursk algunos modelos británicos Churchill y norteamericanos Stuart y Grant.
De los 9.918 carros disponibles, una tercera parte eran ligeros, obsoletos para participar en un moderno campo de batalla. La producción soviética de carros había sido reducida a unos pocos modelos desde el comienzo de la guerra. Hacia 1943, las fábricas soviéticas estaban produciendo carros a una velocidad que doblaba a la alemana. Además se habían ido mejorando los modelos con lo que se contaban.
Se decidió renover el T-34/76 con un cañón de 85 mm, sin embargo este nuevo modelo no estaría listo para participar en Kursk. La mayoría de los carros soviéticos durante la batalla de Kursk fueron del modelo T-34/76. Se contaban aún con algunos modelos del carro pesado KV-1 y del ligero T-70 que participaría en la batalla en gran cantidad. También participaron en Kursk algunos modelos británicos Churchill y norteamericanos Stuart y Grant.
Tanques soviéticos T34/76 entre el humo y fuego de la batalla.
Respecto a los cazacarros, en 1943 entró en servicio el SU-76 del que había una apreciable cantidad durante la batalla de Kursk. También se creó el gigantesco SU-152 apodaba por sus tripulaciones "el cazador de fieras", que fué usado durante la batalla en cantidades limitadas, pero con gran efectividad.
SU 152 "el cazador de fieras" camuflado.
La artillería soviética comenzó a recibir en 1943 el excelente atitanque ZIS-2 de 57 mm, suficiente para acabar con la mayoría de carros alemanes , aunque inservible para un ataque frontal contra los nuevos modelos alemanes como el Tiger y el Panther. Pero el mayor exterminados de infantería alemana y carros fué la artillería. Se organizaron brigadas de antitanques y también de obuses de 152 y 203 mm.
En el campo de los cohetes contaban con el Katyusha, una batería de cohetes, accionada eléctricamente desde una plataforma en tierra o un camión. Llamados los "órganos de Stalin", demostraron un alto poder destructivo y de intimidación.
Se produjeron cambios importantes en la movilidad y motorización del Ejército Rojo. En 1943 el progama o "Ley de Préstamos y Arriendo" de los Estados Unidos proporcionó unos 183.000 camiones y jeeps. El camión Studebaker US6 de 2'5 t contaba con más capacidad y potencia que el soviéticos GAZ-AA.
En la Fuerza Aérea soviética empezaron a volar los nuevos cazas Yak-9D y el Lavochkin La-5FN, así como los mejorados Ilyushin IL-2m "Sturmovich" que montaban un cañón contracarros de 37 mm que iba a causar serios problemas entre los carros alemanes. Todo esto unido a los numeros Hurricane británicos y a los P-39 Airacobra y Curtis P-40 norteamericanos, hicieron de la aviación soviética un temible y nada despreciable adversario.
En el campo de los cohetes contaban con el Katyusha, una batería de cohetes, accionada eléctricamente desde una plataforma en tierra o un camión. Llamados los "órganos de Stalin", demostraron un alto poder destructivo y de intimidación.
Se produjeron cambios importantes en la movilidad y motorización del Ejército Rojo. En 1943 el progama o "Ley de Préstamos y Arriendo" de los Estados Unidos proporcionó unos 183.000 camiones y jeeps. El camión Studebaker US6 de 2'5 t contaba con más capacidad y potencia que el soviéticos GAZ-AA.
En la Fuerza Aérea soviética empezaron a volar los nuevos cazas Yak-9D y el Lavochkin La-5FN, así como los mejorados Ilyushin IL-2m "Sturmovich" que montaban un cañón contracarros de 37 mm que iba a causar serios problemas entre los carros alemanes. Todo esto unido a los numeros Hurricane británicos y a los P-39 Airacobra y Curtis P-40 norteamericanos, hicieron de la aviación soviética un temible y nada despreciable adversario.
IL-2 en un aeródromo cercano al frente
La principal defensa soviética soviética recaía en los Frentes Central y de Voronezh situados al norte y sur del saliente respectivamente. El Frente Central bajo el mando de Rokossovsky contraba con el 2º E. de Tanques de la Guardia, el 13º E, el 48º E, el 60º E, el 65º E y el 70º. En el Frente de Voronezh (Vatutin) tenía en primera en línea a los Ejércitos 38º, 40º, 6º de Guardias y 7º de Guardias. En retaguardia estaban el 1º E de Tanques de Katukov y 69º E. con un cuerpo de infantería y dos de tanques de Guardias.
Al este del saliente y detrás de ambos frentes, se encontraba el poderoso Frente de la Estepa de Konev con 2 Ejércitos de Guardias, 3 Ejércitos de Infantería y el 5º Ejército de Tanques de la Guardia de Rotmistrov.
El total de efectivos soviéticos en julio de 1943 en el saliente de Kursk era de 1.340.000 hombres, 20.000 piezas de artillería y morteros, 3.400 tanques y cañones de asalto y unos 2.700 aviones de todo tipo.
Al este del saliente y detrás de ambos frentes, se encontraba el poderoso Frente de la Estepa de Konev con 2 Ejércitos de Guardias, 3 Ejércitos de Infantería y el 5º Ejército de Tanques de la Guardia de Rotmistrov.
El total de efectivos soviéticos en julio de 1943 en el saliente de Kursk era de 1.340.000 hombres, 20.000 piezas de artillería y morteros, 3.400 tanques y cañones de asalto y unos 2.700 aviones de todo tipo.
4. Planes para la batalla
- Alemania
El 15 de abril de 1943, Hitler finalmente firmaba los 13 ejemplares de la Orden de Operaciones nº 6, cuyos párrafos más importantes señalaban:
“Estoy resuelto a desencadenar la Operación Ciudadela en cuanto el tiempo lo permita, como primera de las acciones ofensivas de este año. En lo que confiere una importancia fudamente a esta ofensiva…”
“A tal efecto ordenó:
1) Objetivo de la ofensiva: mediante una ataque coordinado al máximo, brutal y dinámico de los dos ejércitos, uno saliendo de la región de Belgorod y otro del sur de Orel, rodear a las fuerzas enemigas que se encuentran en la región de la Kursk y aniquilarlas por medio de ataques concéntricos. En el curso de esta ofensiva fijaremos un nuevo frente más estrecho que permitirá economizar medios: la línea Nejega-Korocha-Skorodnoie-Tim-este de Schigri-Sosna”
Para Hitler era necesario para conseguir la victoria asegurarse al máximo el beneficio de la sorpresa y principalmente, mantener al enemigo en la incertidumbre sobre el momento del ataque.
El comienzo de la ofensiva fue fijado para el 4 de mayo, pero hubo varios retrasos debido a la espera para recibir los nuevos cazacarros pesados Ferdinand y los nuevos tanques Panther. Finalmente se decidió que no se podía retrasar más el comienzo de la ofensiva y fecha definitiva se fijó en el 4 de julio.
El plan de von Manstein consistió en lanzar dos ataques hacia el centro de saliente en la ciudad de Kursk; uno desde el norte con el 9º Ejército de Model y otro desde el sur con el 4º Ejército Panzer de Hoth; el Destacamento de Kempf se encargaría de cubrir el flanco de Hoth a la vez que eliminaría los posibles refuerzos soviéticos. La unión de las dos pinzas en Kursk embolsaría a las numerosas fuerzas soviéticas en el saliente a la vez que recortaría el frente.
“Estoy resuelto a desencadenar la Operación Ciudadela en cuanto el tiempo lo permita, como primera de las acciones ofensivas de este año. En lo que confiere una importancia fudamente a esta ofensiva…”
“A tal efecto ordenó:
1) Objetivo de la ofensiva: mediante una ataque coordinado al máximo, brutal y dinámico de los dos ejércitos, uno saliendo de la región de Belgorod y otro del sur de Orel, rodear a las fuerzas enemigas que se encuentran en la región de la Kursk y aniquilarlas por medio de ataques concéntricos. En el curso de esta ofensiva fijaremos un nuevo frente más estrecho que permitirá economizar medios: la línea Nejega-Korocha-Skorodnoie-Tim-este de Schigri-Sosna”
Para Hitler era necesario para conseguir la victoria asegurarse al máximo el beneficio de la sorpresa y principalmente, mantener al enemigo en la incertidumbre sobre el momento del ataque.
El comienzo de la ofensiva fue fijado para el 4 de mayo, pero hubo varios retrasos debido a la espera para recibir los nuevos cazacarros pesados Ferdinand y los nuevos tanques Panther. Finalmente se decidió que no se podía retrasar más el comienzo de la ofensiva y fecha definitiva se fijó en el 4 de julio.
El plan de von Manstein consistió en lanzar dos ataques hacia el centro de saliente en la ciudad de Kursk; uno desde el norte con el 9º Ejército de Model y otro desde el sur con el 4º Ejército Panzer de Hoth; el Destacamento de Kempf se encargaría de cubrir el flanco de Hoth a la vez que eliminaría los posibles refuerzos soviéticos. La unión de las dos pinzas en Kursk embolsaría a las numerosas fuerzas soviéticas en el saliente a la vez que recortaría el frente.
Plan alemán de la Operación Ciudadela y defensas soviéticas
- Unión Soviética
Un factor fundamental para las defensas soviéticas en Kursk fue el conocimiento de los planes de la ofensiva alemana en el sector. “Lucy” nombre en clave del agente alemán Rudolf Rössler era principal integrante de una organización de espionaje soviética conocida como la “Orquesta Roja”. Rössler a través de uno o varios informadores (aún desconocidos) en el OKH (Alto Mando del Ejército alemán) recibió puntual información sobre los preparativos alemanes para ofensiva, así como la fecha del inicio de esta. Tal era el nivel de confianza en “Lucy” por parte del STAVKA que tanto Zhukov como los demás jefes de los Frentes soviéticos en el sector, organizaron intensos reconocimientos del frente alemán, de cuyos resultados, unidos a las informaciones transmitidas por “Lucy”, pudieron confeccionar un plan preliminar para la defensa del frente.
A partir de abril los soviéticos movilizaron a unos 300.000 civiles para que ayudaran a las tropas a preparar las defensas. El objeto era construir una serie defensas diseñadas para obstaculizar, canalizar y “desangrar” a la masa de carros blindados enemigos. Bajo la dirección de expertos ingenieros militares se estableció un cinturón de posiciones de batallones de tiradores y de apoyo, puntos de resistencia anticarros y campos de minas unidos por un extenso sistema de trincheras. Se emplazaron antiaéreos de 85 mm y obuses de 122 y 152 mm apoyados por morteros pesados de 120 mm, todos ellos en posiciones circulares fuertemente camufladas, capaces de castigar los ejes del avance alemán. La defensa anticarros estaba centrada en diversos puntos de resistencia cada uno con 3 o 5 anticarros de 76 mm y soldados equipados con fusiles antitanque y morteros ligeros, así como secciones de ametralladoras y zapadores. Se sembraron durante la primavera más de 40.000 minas de todo tipo. Las trincheras que enlazaban todos los reductos tenían una longitud total que 4.900 km en el conjunto del saliente.
La profundidad de las defensas era impresionante: ocho cinturones defensivos con una profundidad de 176 km. Además estaban reforzadas en su retaguardia por el Frente de la Estepa de Koniev y un cinturón defensivo más que cubría la orilla derecha del río Don. Pero los soviéticos no tenían la intención de recibir con pasividad a las fuerzas alemanas. Dentro de las defensas de cada uno de los Frentes, un ejército con varios cuerpos de tanques estaba dispuesto para contraatacar a las fuerzas alemanas una vez que fuesen evidentes los ejes de su avance.
El Frente Central de Rokossovsky al norte del saliente aguantaría la embestida del 9º Ejército de Model, mientras al sur el Frente de Voronezh de Vatutin, impediría el avance de los carros del 4ª Ejército Panzer de Hoth. Se creó una enorme reserva estratégica que fue el Frente de la Estepa de Konev. Esta enorme fuerza sumaba 5 Ejércitos de Infantería, 1 Ejército de Carros, 1 Ejército de Aviación y 6 cuerpos de reserva, 2 de ellos blindados. Esta descomunal fuerza tenía como objetivo bloquear cualquier penetración alemana de las defensas, así como destruir a las fuerzas acorazadas. En teoría una vez destruidas las fuerzas alemanas, Konev debería estar listo para la lanzar la contraofensiva soviética.
A partir de abril los soviéticos movilizaron a unos 300.000 civiles para que ayudaran a las tropas a preparar las defensas. El objeto era construir una serie defensas diseñadas para obstaculizar, canalizar y “desangrar” a la masa de carros blindados enemigos. Bajo la dirección de expertos ingenieros militares se estableció un cinturón de posiciones de batallones de tiradores y de apoyo, puntos de resistencia anticarros y campos de minas unidos por un extenso sistema de trincheras. Se emplazaron antiaéreos de 85 mm y obuses de 122 y 152 mm apoyados por morteros pesados de 120 mm, todos ellos en posiciones circulares fuertemente camufladas, capaces de castigar los ejes del avance alemán. La defensa anticarros estaba centrada en diversos puntos de resistencia cada uno con 3 o 5 anticarros de 76 mm y soldados equipados con fusiles antitanque y morteros ligeros, así como secciones de ametralladoras y zapadores. Se sembraron durante la primavera más de 40.000 minas de todo tipo. Las trincheras que enlazaban todos los reductos tenían una longitud total que 4.900 km en el conjunto del saliente.
La profundidad de las defensas era impresionante: ocho cinturones defensivos con una profundidad de 176 km. Además estaban reforzadas en su retaguardia por el Frente de la Estepa de Koniev y un cinturón defensivo más que cubría la orilla derecha del río Don. Pero los soviéticos no tenían la intención de recibir con pasividad a las fuerzas alemanas. Dentro de las defensas de cada uno de los Frentes, un ejército con varios cuerpos de tanques estaba dispuesto para contraatacar a las fuerzas alemanas una vez que fuesen evidentes los ejes de su avance.
El Frente Central de Rokossovsky al norte del saliente aguantaría la embestida del 9º Ejército de Model, mientras al sur el Frente de Voronezh de Vatutin, impediría el avance de los carros del 4ª Ejército Panzer de Hoth. Se creó una enorme reserva estratégica que fue el Frente de la Estepa de Konev. Esta enorme fuerza sumaba 5 Ejércitos de Infantería, 1 Ejército de Carros, 1 Ejército de Aviación y 6 cuerpos de reserva, 2 de ellos blindados. Esta descomunal fuerza tenía como objetivo bloquear cualquier penetración alemana de las defensas, así como destruir a las fuerzas acorazadas. En teoría una vez destruidas las fuerzas alemanas, Konev debería estar listo para la lanzar la contraofensiva soviética.
Grupo de trabajo (mayoritariamente femenino) reparando la vía de ferrocaril en Ashkajava.
Posición antitanque de 45mm.
Posición soviética de morteros de 82mm.
5. La batalla de Kursk
Durante las semanas de mayo y junio la actividad partisana en la retaguardia de las líneas alemanas había aumentado. Cientos de locomotoras y miles de elementos de material rodante fueron saboteados o destruidos. Las fuerzas alemanas lanzaron algunas operaciones anti partisanas que consiguieron neutralizar a algunos de estos elementos.
Después de varios aplazamientos, Hitler anunció, el 25 de junio que la Operación Ciudadela daría comienzo en las primeras horas del día 5 de julio de 1943.
Los rusos habían sido advertidos por “Lucy” que la ofensiva se iniciaría entre el 3 y el de julio. Rokossovsky y Vatutin pusieron inmediatamente en alerta máxima a sus respectivos Frentes.
El 4 de julio un esloveno desertor de un pelotón de ingenieros alemán informó a sus interrogadores soviéticos que su unidad había recibido órdenes de despejar los campos minas. También declaró que las tropas alemanas habían recibido raciones especiales y schapps para unos días sin tener que reabastecerse.
Zhukov desde el Cuartel General de Rokossovsky, tras recibir las nuevas informaciones se puso en contacto telefónico con Stalin para comunicarle las nuevas noticias, la disposición final para la batalla y la decisión de lanzar un bombardeo preventivo sobre las posiciones alemanas.
La gran ofensiva que ambos bandos esperaban comenzó con un ataque de artillería soviético de contrapreparación . A las 2.20 horas de la mañana del 5 de julio, uno pocos minutos antes que comenzara el ataque alemán, los soviéticos lanzaron sus obuses sobre las posiciones alemanas por todo el frente de ataque. El bombardeo soviético tuvo una duración de media hora, durante la cual se sembró el desconcierto y se destrozaron parte de los preparativos alemanes. Cuando los alemanes se dieron cuenta que todo era un ataque preventivo y que estos no avanzaban, se recibieron órdenes de seguir adelante con la ofensiva.
A las 2.45 horas un intenso zumbido retumbaba sobre el cielo del saliente. En la zona sur, los Stuka de la 4º Luftflotte atravesaban las líneas alemanas acompañados de su escolta de cazas para bombardear las posiciones enemigas. Pocos minutos más tarde la artillería y las baterías de cohetes Nebelwerfer abrieron fuego sobre las posiciones soviéticas del Frente Central y del Frente de Voronezh a norte y sur respectivamente.
En los combates aéreos preliminares los soviéticos tuvieron poco éxito. En el Cuartel General del VIII Fliegerkorps (sector sur del saliente) del general Hans Seidemann, las emisoras de radio comenzaron a informar sobre un aumento progresivo del tráfico aéreo enemigo. El plan de Seidemann era lanzar sus 800 aviones para atacar las bases aéreas soviéticas. Sin embargo descubrió que fue el 17º Ejército Aéreo soviético el que ya se encontraba en el aire dirigiéndose hacia las congestionadas pistas aéreas alemanas para lanzar un ataque preventivo. El radar de alerta alemana Freya en Kharkov detectó las formaciones aéreas soviéticas dirigiéndose hacia los aérodromos alemanes. En ese momento todas las formaciones de cazas disponibles se lanzaron para neutralizar a las formaciones soviéticas. Los cazas despegaron mientras los bombarderos esperaban con sus motores encendidos. Los 450 aviones soviéticos se encontraron con cientos de cazas FW 190 y Me Bf 109 que se lanzaron ferozmente contra sus presas. En poco tiempo, 120 aviones soviéticos fueron derribados.
Las pérdidas alemanas fueron tan pequeñas que el VIII Fliegerkorps logró una victoria total y consiguió durante unos días dominar los cielos.
En el norte del saliente, el I Fliegerkorps de Deichmann derribó cerca de un centenar de aviones soviéticos con la pérdida de 20 aviones propios. Quizá las cifras fuera exageradas por los alemanes para elevar la moral de las tropas, pero es claro que durante los primeros encuentros en el aire en el saliente de Kursk la Luftwaffe salió prácticamente indemne.
Después de varios aplazamientos, Hitler anunció, el 25 de junio que la Operación Ciudadela daría comienzo en las primeras horas del día 5 de julio de 1943.
Los rusos habían sido advertidos por “Lucy” que la ofensiva se iniciaría entre el 3 y el de julio. Rokossovsky y Vatutin pusieron inmediatamente en alerta máxima a sus respectivos Frentes.
El 4 de julio un esloveno desertor de un pelotón de ingenieros alemán informó a sus interrogadores soviéticos que su unidad había recibido órdenes de despejar los campos minas. También declaró que las tropas alemanas habían recibido raciones especiales y schapps para unos días sin tener que reabastecerse.
Zhukov desde el Cuartel General de Rokossovsky, tras recibir las nuevas informaciones se puso en contacto telefónico con Stalin para comunicarle las nuevas noticias, la disposición final para la batalla y la decisión de lanzar un bombardeo preventivo sobre las posiciones alemanas.
La gran ofensiva que ambos bandos esperaban comenzó con un ataque de artillería soviético de contrapreparación . A las 2.20 horas de la mañana del 5 de julio, uno pocos minutos antes que comenzara el ataque alemán, los soviéticos lanzaron sus obuses sobre las posiciones alemanas por todo el frente de ataque. El bombardeo soviético tuvo una duración de media hora, durante la cual se sembró el desconcierto y se destrozaron parte de los preparativos alemanes. Cuando los alemanes se dieron cuenta que todo era un ataque preventivo y que estos no avanzaban, se recibieron órdenes de seguir adelante con la ofensiva.
A las 2.45 horas un intenso zumbido retumbaba sobre el cielo del saliente. En la zona sur, los Stuka de la 4º Luftflotte atravesaban las líneas alemanas acompañados de su escolta de cazas para bombardear las posiciones enemigas. Pocos minutos más tarde la artillería y las baterías de cohetes Nebelwerfer abrieron fuego sobre las posiciones soviéticas del Frente Central y del Frente de Voronezh a norte y sur respectivamente.
En los combates aéreos preliminares los soviéticos tuvieron poco éxito. En el Cuartel General del VIII Fliegerkorps (sector sur del saliente) del general Hans Seidemann, las emisoras de radio comenzaron a informar sobre un aumento progresivo del tráfico aéreo enemigo. El plan de Seidemann era lanzar sus 800 aviones para atacar las bases aéreas soviéticas. Sin embargo descubrió que fue el 17º Ejército Aéreo soviético el que ya se encontraba en el aire dirigiéndose hacia las congestionadas pistas aéreas alemanas para lanzar un ataque preventivo. El radar de alerta alemana Freya en Kharkov detectó las formaciones aéreas soviéticas dirigiéndose hacia los aérodromos alemanes. En ese momento todas las formaciones de cazas disponibles se lanzaron para neutralizar a las formaciones soviéticas. Los cazas despegaron mientras los bombarderos esperaban con sus motores encendidos. Los 450 aviones soviéticos se encontraron con cientos de cazas FW 190 y Me Bf 109 que se lanzaron ferozmente contra sus presas. En poco tiempo, 120 aviones soviéticos fueron derribados.
Las pérdidas alemanas fueron tan pequeñas que el VIII Fliegerkorps logró una victoria total y consiguió durante unos días dominar los cielos.
En el norte del saliente, el I Fliegerkorps de Deichmann derribó cerca de un centenar de aviones soviéticos con la pérdida de 20 aviones propios. Quizá las cifras fuera exageradas por los alemanes para elevar la moral de las tropas, pero es claro que durante los primeros encuentros en el aire en el saliente de Kursk la Luftwaffe salió prácticamente indemne.
- Zona norte del saliente
-5 de julio
El 5 de julio de 1943, tras el cese del ataque artillero de las tropas soviéticas del Frente Central, cientos de baterías y Nebelwerfers del 9º Ejército abrieron fuego sobre las posiciones soviéticas a las 4.30 horas.
Sobre la 5.00 horas observadores avanzados del 13º Ejército soviético informaron de fuertes ataques en su sector apoyados por carros y cañones de asalto. El primer movimiento fue hecho en flanco derecho del 9º Ejército, por las Divisiones de Infantería 216ª y 78ª del XXII Cuerpo de Freissner que lanzó un durísimo ataque contra el fuertemente defendido cruce de caminos de Maloarjangelsk. Aquí fueron empleados los Ferdinand con sus vehículos de demolición Goliath. Aunque los alemanes consiguieron penetrar en el perímetro defensivo soviético exterior, la 129ª Brigada acorazada soviética lanzó un exitoso contraataque.
En el frente del XLVI Cuerpo Panzer de Zorn, en el flanco izquierdo del 9º Ejército, las Divisiones de Infantería 258ª y 7ª, se lanzaron sobre el ala del 70º Ejército soviético. En el transcurso de una hora quedó claro que las defensas soviéticas serían difíciles de penetrar. La infantería era continuamente bombardeada por artillería, morteros y armas ligeras y los intentos por cubrirse del fuego soviético en las zonas muertas o entre el centeno se saldaron con numerosas bajas debido a las minas antipersonas allí sembradas. Debido a esta fiera lucha, ambas divisiones alemanas se vieron obligadas a detenerse al final del día.
En el sector asignado a el XVLII Cuerpo Panzer de Lemelsen, los ingenieros alemanes comenzaron a despejar los campos de minas para abrir pasillos a través de los cuales pudieran avanzar los carros de la 20ª División Panzer. Sostenida por un fuego pesado de su artillería divisionaria y con apoyo aéreo la 20ª División Panzer arrolló el frente del 321º Regimiento de fusileros soviético apoderándose de la población de Bobrik. Al tomar dicha población, los alemanes rompieron las posiciones de la 15ª División de Fusileros y habían avanzado 5 km dentro de dichas posiciones.
Bajo un intensos ataques de la aviación soviética, la 6ª División de Infantería había entrado en acción a lo largo del valle del río Oka en dirección Oljovatka. Junto a esta unidad estaban adscritas la 1ª y 2º compañías del 505º Batallón Pesado Panzer equipado con Tiger I. Avanzando rápidamente los Tiger destruyeron una pantalla de defensiva de T-34 y cañones anticarro antes de adentrarse en flanco del 676º Regimiento de Fusileros. Al mediodía los Tiger habían tomado el pueblo de Butyrki, amenazando con trastornar el ala izquierda de la 81º División de Fusileros, que se encontraba bajo la presión de la 292ª División de Infantería alemana del XLI Cuerpo Panzer de Harpe. Esta división había soportado desde la mañana una feroz lucha. Un destacamento de cazacarros pesados Ferdinand del Jagdpanzer Abteilung 653, avanzó sobre las líneas de la 81ª División de Fusileros hacia Alexandrovka, aunque su éxito fue más aparente que real. Detrás de ellos la infantería soviética selló la brecha forzando a la infantería alemana ahora desprovista del apoyo de los blindados, a luchar por cada centímetro de terreno. Al acabar el día la 86ª División de Infantería alemana (XLI Cuerpo) alcanzó las afueras de Ponyri.
Al acabar el primer día de combates las unidades de los Cuerpos Panzer XLVII y XLI habían conseguido penetrar de seis a diez kilómetros en el entramado defensivo soviético, pero a un gran coste de hombres y material.
Con la continuación de los combates, Rokossovsky dedujo que Model desplegaría el grueso de sus blindados en el área de Butyrki y Bobrik donde el duro castigo inflingido a la 15ª División de Fusileros ofrecía a los alemanes un hueco que podrían explotar. Eso significaba que el ataque principal sería sobre Oljovatka. De esta forma se produciría un rápido despliegue y refuerzo de las unidades soviéticas sobre esta zona del eje del avance alemán.
Sobre la 5.00 horas observadores avanzados del 13º Ejército soviético informaron de fuertes ataques en su sector apoyados por carros y cañones de asalto. El primer movimiento fue hecho en flanco derecho del 9º Ejército, por las Divisiones de Infantería 216ª y 78ª del XXII Cuerpo de Freissner que lanzó un durísimo ataque contra el fuertemente defendido cruce de caminos de Maloarjangelsk. Aquí fueron empleados los Ferdinand con sus vehículos de demolición Goliath. Aunque los alemanes consiguieron penetrar en el perímetro defensivo soviético exterior, la 129ª Brigada acorazada soviética lanzó un exitoso contraataque.
En el frente del XLVI Cuerpo Panzer de Zorn, en el flanco izquierdo del 9º Ejército, las Divisiones de Infantería 258ª y 7ª, se lanzaron sobre el ala del 70º Ejército soviético. En el transcurso de una hora quedó claro que las defensas soviéticas serían difíciles de penetrar. La infantería era continuamente bombardeada por artillería, morteros y armas ligeras y los intentos por cubrirse del fuego soviético en las zonas muertas o entre el centeno se saldaron con numerosas bajas debido a las minas antipersonas allí sembradas. Debido a esta fiera lucha, ambas divisiones alemanas se vieron obligadas a detenerse al final del día.
En el sector asignado a el XVLII Cuerpo Panzer de Lemelsen, los ingenieros alemanes comenzaron a despejar los campos de minas para abrir pasillos a través de los cuales pudieran avanzar los carros de la 20ª División Panzer. Sostenida por un fuego pesado de su artillería divisionaria y con apoyo aéreo la 20ª División Panzer arrolló el frente del 321º Regimiento de fusileros soviético apoderándose de la población de Bobrik. Al tomar dicha población, los alemanes rompieron las posiciones de la 15ª División de Fusileros y habían avanzado 5 km dentro de dichas posiciones.
Bajo un intensos ataques de la aviación soviética, la 6ª División de Infantería había entrado en acción a lo largo del valle del río Oka en dirección Oljovatka. Junto a esta unidad estaban adscritas la 1ª y 2º compañías del 505º Batallón Pesado Panzer equipado con Tiger I. Avanzando rápidamente los Tiger destruyeron una pantalla de defensiva de T-34 y cañones anticarro antes de adentrarse en flanco del 676º Regimiento de Fusileros. Al mediodía los Tiger habían tomado el pueblo de Butyrki, amenazando con trastornar el ala izquierda de la 81º División de Fusileros, que se encontraba bajo la presión de la 292ª División de Infantería alemana del XLI Cuerpo Panzer de Harpe. Esta división había soportado desde la mañana una feroz lucha. Un destacamento de cazacarros pesados Ferdinand del Jagdpanzer Abteilung 653, avanzó sobre las líneas de la 81ª División de Fusileros hacia Alexandrovka, aunque su éxito fue más aparente que real. Detrás de ellos la infantería soviética selló la brecha forzando a la infantería alemana ahora desprovista del apoyo de los blindados, a luchar por cada centímetro de terreno. Al acabar el día la 86ª División de Infantería alemana (XLI Cuerpo) alcanzó las afueras de Ponyri.
Al acabar el primer día de combates las unidades de los Cuerpos Panzer XLVII y XLI habían conseguido penetrar de seis a diez kilómetros en el entramado defensivo soviético, pero a un gran coste de hombres y material.
Con la continuación de los combates, Rokossovsky dedujo que Model desplegaría el grueso de sus blindados en el área de Butyrki y Bobrik donde el duro castigo inflingido a la 15ª División de Fusileros ofrecía a los alemanes un hueco que podrían explotar. Eso significaba que el ataque principal sería sobre Oljovatka. De esta forma se produciría un rápido despliegue y refuerzo de las unidades soviéticas sobre esta zona del eje del avance alemán.
Posición defensiva soviética con subfusiles PPSh, fusiles anticarro PTRS y ametralladora Maxim.
El Zis 3 de 76 mm fué usada ampliamente por los soviéticos como arma anticarro.
Artillería alemana del 9º Ejército abriendo fuego sobre las posiciones soviéticas
Escuadrilla de Stuka dirigiéndose hacia las posiciones soviéticas.
-6 – 9 de Julio.
En las primeras horas del 6 de julio, Rokossovky había completado la redistribución de sus fuerzas para afrontar la reanudación de la ofensiva alemana. La 18ª División de Fusileros de la Guardia había sido enviada para reforzar Maloarjangelsk, con el 3er Cuerpo de Carros. El 17º Cuerpo de Fusileros de la Guardia fue desplazado para reforzar la zona defensiva del 13er Ejército y, para cubrir el previsible avance alemán hacia Oljovatka, había estacionado al 19º Cuerpo de Carros al oeste y al 16º Cuerpo de Carros al noreste del pueblo. El 16º Cuerpo de Carros lanzó una ataque a primera hora del día 6, con unos 100 T-34 y T-70. Después de penetrar unos 3 kilómetros, fueron rechazados por la 2ª División Panzer, que acababa de aparecer en el campo de batalla. Desplegados junto a los Panzer IV y los cañones de asalto estaban los Tiger del 505º Batallón Pesado Panzer, ahora adscritos a la 2ª División Panzer.
Con el avance de los Tiger hacia la cota 274 y Oljovatka, que Model consideraba claves para hacer saltar el sistema defensivo soviético, los alemanes empezaron a trasladar al campo de batalla más y más blindados, con la 9º División Panzer desplegándose junto a otras divisones acorazadas entre los pueblos de Soborovka y Pervyye Ponyri. La concentración alemana tenía no menos de 1.000 carros y cazacarros, apoyados por 3.000 cañones y morteros en un frente de 10 kilómetros. Frente a esa potente fuerza los soviéticos concentraron un número similar de carros y cañones de asalto propios. La fuerza principal del asalto alemán fueron los Tiger del 505º Batallón Pesado Panzer que demostraron la enorme utilidad de su cañón de 88 mm y su espeso blindaje. Cuando entraron en el entramado defensivo soviético, los Panzer IV y Tiger fueron detenidos por los T-34 enterrados, las baterías anticarro y los fusiles anticarro ocultos desde posiciones perfectamente camufladas. Otros fueron alcanzados por las minas o por infantes armados de “cócteles Molotov”, mientras las ametralladoras y morteros diezmaban a la infantería que acompañaba a los carros. La 2ª y 9ª Divisiones Panzer fueron rechazadas y al atardecer con la disminución de los combates, numerosos carros alemanes están convertidos en chatarra. El fracaso se vió agravando cuando fue rechazado el ataque del XXIII Cuerpo a la población Maloarjangelsk.
Los días 7 y 8 Model, volvió a intentar los ataques, aunque esta vez enviando sus fuerzas a un frente más amplio que el día 6. Por su parte, Rokossovsky, decidió reforzar sus reservas extrayendo unidades de sectores relativamente tranquilos del frente para apoyar al 13er Ejército. Las pérdidas de blindados soviéticos cuando se enfrentaban a larga distancia a los Tiger obligaron que a muchos de los carros soviéticos fueran enterrados. Los combates fueron especialmente duros en el pueblo de Ponyri y en la cota 253’5. La lucha por este pequeño pueblo había sido comparada por alemanes y soviéticos con un “Stalingrado en miniatura”. Situado entre la línea férrea que iba de Orel a Kursk, su importancia local radicaba en ser un punto importante de recepción de mercancías y maquinaria y distribución de productos para las granjas colectivas de los alrededores. Durante 6 días esta población fue el foco de grandes combates. Unidades de la 292ª División de Infantería alemana capturaron el apeadero del tren y la parte norte del pueblo el día inicial de la ofensiva, pero el día 6 la lucha por el control de la población estaba absorbiendo un gran número de tropas alemanas. Para apoyar a la 292ª División, Model envió como refuerzos a la 9º y 18ª Divisiones Panzer y a la 86ª División de Infantería. De igual manera los soviéticos reforzaron sus posiciones en Ponyri con artillería, morteros y carros. El día 7, entre Oljovatka y Ponyri unos 300 panzer chocaron en un ataque frontal contra los T-34 de los 16º y 19º Cuerpos de Carros soviéticos. En el mismo Ponyri se libró un feroz combate cuerpo a cuerpo con apoyo de artillería, carros y cañones autopropulsados, con ambos bandos luchando por cada palmo de terreno. Entre el los días 6 y 9 los combates estuvieron produciéndose en la escuela, el depósito de agua y la estación de tren. Numerosos panzer fueron detenidos en los campos de minas y puestos fuera de combate por los T-34 enterrados, el fuego de los antitanque y las unidades de infantería con fusiles antitanque y “cócteles Molotov”. El día 9 los alemanes atacaron otra vez, usando 6 cazacarros pesados Ferdinand como fuego de apoyo, haciendo un envite para tomar la cota 253’5, situada al noreste del pueblo. A pesar del daño y las graves bajas que los ataques alemanes causaban a su enemigo, los soviéticos estaban consiguiendo su objetivo de desangrar a la infantería y los blindados alemanes.
Pese a las importantes bajas de los días 6 y 7, Model, reorganizó sus fuerzas para intentar una ruptura definitiva sobre el frente soviético. Mientras la artillería alemana y la Luftwaffe bombardeaban las defensas soviéticas, el ataque se producía en dos ejes principales: la 2ª y 20ª Divisiones Panzer dirigieron hacia la línea Samodurovka-Teploye-Molotychi y, más al este la 18ª y 19ª Divisiones Panzer presionaban sobre las defensas de Oljovatka. Aunque Rokossovky había reforzado esas posiciones la incorporación de la 4ª División Panzer de Von Saucken hacia Samodurovka consiguió finalmente quebrar la línea soviética cuando unos 300 panzer atravesaron sus líneas en un estrecho frente. Al día siguiente, los alemanes continuaban con la presión, desplegando a 4 Divisiones Panzer apoyadas por la 6ª División de Infantería a lo largo delos 16 kilómetros de línea del frente que se extendía entre Samodurovka y Pervyye Ponyri. La 4ª División Panzer desplegada ahora junto a las 2ª y 20ª Divisiones Panzer en Teploye, libró una batalla indecisa sobre el control de este pueblo, con ambos bandos enviando una gran cantidad de carros e infantería con un potente apoyo aéreo y de artillería. Finalmente los alemanes lograron tomar el pueblo, pero los tres intentos posteriores de conquistar las alturas situadas detrás fueron rechazados por la feroz resistencia soviética y el intenso muro artillero que levantaron sobre los Panzer. Más al este frente a Oljovatka, los repetidos ataques contra las líneas soviéticas rompieron las defensas soviéticas, permitiendo a los alemanes progresar hacia las pendientes de las lomas. Pero los intentos de tomar estas pendientes y la cota 274 fueron una sangría entre las filas alemanas. El día 9 de julio la 6º División de Infantería atacó la cota 274 en un feroz asalto, pero se vio obligada a detenerse ante el incesante fuego de artillería y los contraataques infantería soviéticos. Aunque los intentos de progresar se repitieron en los días siguientes, los restos de los destrozados panzer señalando el avance del 9º Ejército eran un testigo mudo del hecho de que el impulso de la ofensiva había empezado a decaer.
Con el avance de los Tiger hacia la cota 274 y Oljovatka, que Model consideraba claves para hacer saltar el sistema defensivo soviético, los alemanes empezaron a trasladar al campo de batalla más y más blindados, con la 9º División Panzer desplegándose junto a otras divisones acorazadas entre los pueblos de Soborovka y Pervyye Ponyri. La concentración alemana tenía no menos de 1.000 carros y cazacarros, apoyados por 3.000 cañones y morteros en un frente de 10 kilómetros. Frente a esa potente fuerza los soviéticos concentraron un número similar de carros y cañones de asalto propios. La fuerza principal del asalto alemán fueron los Tiger del 505º Batallón Pesado Panzer que demostraron la enorme utilidad de su cañón de 88 mm y su espeso blindaje. Cuando entraron en el entramado defensivo soviético, los Panzer IV y Tiger fueron detenidos por los T-34 enterrados, las baterías anticarro y los fusiles anticarro ocultos desde posiciones perfectamente camufladas. Otros fueron alcanzados por las minas o por infantes armados de “cócteles Molotov”, mientras las ametralladoras y morteros diezmaban a la infantería que acompañaba a los carros. La 2ª y 9ª Divisiones Panzer fueron rechazadas y al atardecer con la disminución de los combates, numerosos carros alemanes están convertidos en chatarra. El fracaso se vió agravando cuando fue rechazado el ataque del XXIII Cuerpo a la población Maloarjangelsk.
Los días 7 y 8 Model, volvió a intentar los ataques, aunque esta vez enviando sus fuerzas a un frente más amplio que el día 6. Por su parte, Rokossovsky, decidió reforzar sus reservas extrayendo unidades de sectores relativamente tranquilos del frente para apoyar al 13er Ejército. Las pérdidas de blindados soviéticos cuando se enfrentaban a larga distancia a los Tiger obligaron que a muchos de los carros soviéticos fueran enterrados. Los combates fueron especialmente duros en el pueblo de Ponyri y en la cota 253’5. La lucha por este pequeño pueblo había sido comparada por alemanes y soviéticos con un “Stalingrado en miniatura”. Situado entre la línea férrea que iba de Orel a Kursk, su importancia local radicaba en ser un punto importante de recepción de mercancías y maquinaria y distribución de productos para las granjas colectivas de los alrededores. Durante 6 días esta población fue el foco de grandes combates. Unidades de la 292ª División de Infantería alemana capturaron el apeadero del tren y la parte norte del pueblo el día inicial de la ofensiva, pero el día 6 la lucha por el control de la población estaba absorbiendo un gran número de tropas alemanas. Para apoyar a la 292ª División, Model envió como refuerzos a la 9º y 18ª Divisiones Panzer y a la 86ª División de Infantería. De igual manera los soviéticos reforzaron sus posiciones en Ponyri con artillería, morteros y carros. El día 7, entre Oljovatka y Ponyri unos 300 panzer chocaron en un ataque frontal contra los T-34 de los 16º y 19º Cuerpos de Carros soviéticos. En el mismo Ponyri se libró un feroz combate cuerpo a cuerpo con apoyo de artillería, carros y cañones autopropulsados, con ambos bandos luchando por cada palmo de terreno. Entre el los días 6 y 9 los combates estuvieron produciéndose en la escuela, el depósito de agua y la estación de tren. Numerosos panzer fueron detenidos en los campos de minas y puestos fuera de combate por los T-34 enterrados, el fuego de los antitanque y las unidades de infantería con fusiles antitanque y “cócteles Molotov”. El día 9 los alemanes atacaron otra vez, usando 6 cazacarros pesados Ferdinand como fuego de apoyo, haciendo un envite para tomar la cota 253’5, situada al noreste del pueblo. A pesar del daño y las graves bajas que los ataques alemanes causaban a su enemigo, los soviéticos estaban consiguiendo su objetivo de desangrar a la infantería y los blindados alemanes.
Pese a las importantes bajas de los días 6 y 7, Model, reorganizó sus fuerzas para intentar una ruptura definitiva sobre el frente soviético. Mientras la artillería alemana y la Luftwaffe bombardeaban las defensas soviéticas, el ataque se producía en dos ejes principales: la 2ª y 20ª Divisiones Panzer dirigieron hacia la línea Samodurovka-Teploye-Molotychi y, más al este la 18ª y 19ª Divisiones Panzer presionaban sobre las defensas de Oljovatka. Aunque Rokossovky había reforzado esas posiciones la incorporación de la 4ª División Panzer de Von Saucken hacia Samodurovka consiguió finalmente quebrar la línea soviética cuando unos 300 panzer atravesaron sus líneas en un estrecho frente. Al día siguiente, los alemanes continuaban con la presión, desplegando a 4 Divisiones Panzer apoyadas por la 6ª División de Infantería a lo largo delos 16 kilómetros de línea del frente que se extendía entre Samodurovka y Pervyye Ponyri. La 4ª División Panzer desplegada ahora junto a las 2ª y 20ª Divisiones Panzer en Teploye, libró una batalla indecisa sobre el control de este pueblo, con ambos bandos enviando una gran cantidad de carros e infantería con un potente apoyo aéreo y de artillería. Finalmente los alemanes lograron tomar el pueblo, pero los tres intentos posteriores de conquistar las alturas situadas detrás fueron rechazados por la feroz resistencia soviética y el intenso muro artillero que levantaron sobre los Panzer. Más al este frente a Oljovatka, los repetidos ataques contra las líneas soviéticas rompieron las defensas soviéticas, permitiendo a los alemanes progresar hacia las pendientes de las lomas. Pero los intentos de tomar estas pendientes y la cota 274 fueron una sangría entre las filas alemanas. El día 9 de julio la 6º División de Infantería atacó la cota 274 en un feroz asalto, pero se vio obligada a detenerse ante el incesante fuego de artillería y los contraataques infantería soviéticos. Aunque los intentos de progresar se repitieron en los días siguientes, los restos de los destrozados panzer señalando el avance del 9º Ejército eran un testigo mudo del hecho de que el impulso de la ofensiva había empezado a decaer.
Infantería soviética avanzando por las ruinas de la población de Ponyri. 10 Julio 1943.
Infantes soviéticos armados con subfusiles PPSh en una zona fabril de Ponyri, el llamado "Stalingrado de Kursk".
Cazacarros pesado Ferdinand puesto fuera de combate.
-10 de Julio.
Aunque las fuerzas alemanas habían continuado atacando Ponyri durante el 9 de Julio, el fracaso del asalto a Teploye y a las alturas de Oljovatka el día 8 obligó a Model a consumir el día reagrupando sus unidades. Su intención era atacar otra vez el día 10 y ya había hecho avanzar a la 10ª División de Granaderos Panzer y la 31ª División de Infantería (sus últimas unidades de reserva) para apoyar el asalto a Ponyri que aún continuaba. Aún se pensaba que se podría romper de una forma decisiva el sistema defensivo soviético. Sin embargo Stalin y Zhukov, convencidos que el avance alemán estaba estancado decidieron lanzar al ataque al Frente de Briansk (Popov) y al ala izquierda del Frente del Oeste (Sokolovsky) sobre las fuerzas alemanas en el saliente de Orel el 12 de Julio para forzar a las unidades del 9º Ejército a retirarse. En ese instante el Frente Central de Rokossovsky comenzaría una contraofensiva con la esperanza de sorprender a las fuerzas alemanas antes que pudieran organizar sus defensas.
Bajo un tiempo desapacible con viento y lluvia aún los alemanes hicieron un intento de avanzar sobre las alturas de Oljovatka. Precedidos por un intenso fuego de artillería y con el masivo apoyo de los bombarderos en picado de la Luftwaffe, unos 300 panzer de las 2ª y 4ª Divisiones Panzer se desplegaron para asaltar las últimas defensas escalonadas que tenían los soviéticos en las crestas. La infantería a pié fue dejada atrás por los panzer y en terreno descubierto fue presa de la atrincherada infantería soviética, el fuego masivo de artillería y los ataques aéreos. También muchos panzer fueron puestos fuera de combate por los T-34 enterrados. Aunque consiguieron algunos avances puntuales, por la tarde el impulso del avance se había agotado. Model ordenó entonces al 9º Ejército ponerse a la defensiva excepto en Ponyri. En 6 días el 9º Ejército había tenido unas bajas enormes en hombres y carros de combate en una ofensiva que en ningún punto superó los 15 kilómetros.
Bajo un tiempo desapacible con viento y lluvia aún los alemanes hicieron un intento de avanzar sobre las alturas de Oljovatka. Precedidos por un intenso fuego de artillería y con el masivo apoyo de los bombarderos en picado de la Luftwaffe, unos 300 panzer de las 2ª y 4ª Divisiones Panzer se desplegaron para asaltar las últimas defensas escalonadas que tenían los soviéticos en las crestas. La infantería a pié fue dejada atrás por los panzer y en terreno descubierto fue presa de la atrincherada infantería soviética, el fuego masivo de artillería y los ataques aéreos. También muchos panzer fueron puestos fuera de combate por los T-34 enterrados. Aunque consiguieron algunos avances puntuales, por la tarde el impulso del avance se había agotado. Model ordenó entonces al 9º Ejército ponerse a la defensiva excepto en Ponyri. En 6 días el 9º Ejército había tenido unas bajas enormes en hombres y carros de combate en una ofensiva que en ningún punto superó los 15 kilómetros.
Uno de los 6 cazacarros pesados Ferdinand usados en el asalto a la cota 253'3 en Ponyri.
Cazas soviéticos Yak 9-D
Panzers III de la 4ª Div. Panzer de von Saucken avanzando hacia Samodurovka.
-11 de Julio.
Aún el 11 de Julio, Model hizo otro intento de romper las líneas soviéticas en Oljovatka, cuando los potentes ataques de tanteo que lanzaron los soviéticos sobre el 2º Ejército Panzer en el saliente de Orel hicieron a Model a modificar sus planes. A medida que esos ataques aumentaban en intensidad, se hacía más evidente que no eran sino un el preludio a una ofensiva soviética para la que Von Kluge (Comandante en Jefe del Grupo de Ejércitos Centro) no tenía fuerzas con las que responder, ya que había asignado sus reservas al 9º Ejército. No le quedaba más remedio que recurrir a la infantería y panzers del 9º Ejército.
A mediodía Rokossovsky comenzó a recibir noticias sobre el repliegue de numerosas unidades alemanas hacia el norte. Esta retirada había sido prevista por Zhukov, por el que cuando el Frente de Briansk lanzó su ofensiva el día 12 de Julio, las unidades alemanas todavía se encontraban en marcha hacia sus nuevas posiciones.
A mediodía Rokossovsky comenzó a recibir noticias sobre el repliegue de numerosas unidades alemanas hacia el norte. Esta retirada había sido prevista por Zhukov, por el que cuando el Frente de Briansk lanzó su ofensiva el día 12 de Julio, las unidades alemanas todavía se encontraban en marcha hacia sus nuevas posiciones.
Marder II de la 4ª Div. Panzer en una pausa en los combates
- Zona sur del saliente. La batalla de Prokhorovka
-5 de Julio.
A las 3.30 horas el 4º en el frente del 4º Ejército Panzer de Hoth las unidades alemanas habían desencadenado una fuerte barrera de artillería en todo su sector. Las órdenes de Hoth eran “tomar contacto” con el 9º Ejército de Model dirigiéndose a Kursk vía Oboyan. Una día antes (4 de Julio) diversas unidades realizaron un ataque preventivo para tomar ciertos puntos estratégicos de observación con objeto de que la artillería pudiera emplazarse y hacer frente al 6º Ejército de Guardias soviético. Gracias al reconocimiento aéreo, Hoth sabía que en la ruta de su 4º Ejército Panzer se enfrentaría al 1er Ejército de Tanques de Katukov y que varios cuerpos de tanques soviéticos se encontraban desplegados hacia el saliente de Kursk. En la zona del vértice sudeste del saliente se encontraba el 5º Ejército de Tanques de Guardias. Estudiando el frente, Hoth decidió lanzar su ataque hacia el norte y posteriormente girar al nordeste, evitando así un choque frontal con el 1er Ejército de Tanques soviético. Dicho plan facilitaría la labor del Destacamento de Kempf que podría cubrir el flanco derecho del 4º Ejército Panzer. La labor de Kempf era cubrir a las fuerzas de Hoth y unirse a ellas en Prokhorovka para acabar allí embolsando a las fuerzas soviéticas.
A las 4.00 horas, el 4º Ejército Panzer pasó a la ofensiva en totalidad de los 50 kilómetros de su frente en Belgorod y Gertsovka. Los panzer rodaron por los pasillos abiertos en los campos de minas por los zapadores durante la noche. En total, 700 carros y cañones de asalto de dos cuerpos panzer lanzaron un puño de acero sobre el 6º Ejército de Guardias de Chistyakov, pero tales esperanzas se desvanecieron rápidamente ante la realidad de la enorme escala de las defensas soviéticas y de otros factores que escapaban al control de los planificadores de la ofensiva.
En el sector del XLVIII Cuerpo Panzer de von Knobelsdorff (4º Ejército Panzer), la clave para romper las defensas soviéticas a cada lado de Butovo y ejecutar un rápido avance hacia la orilla sur del río Pena era la concentración masiva de potencia de fuego con la que contaba la 10ª Brigada Panther, equipada con los nuevos Panther. Apenas concluido el bombardeo, los 200 Panther de la Brigada Decker avanzaron desde Butovo y casi inmediatamente se metieron en un campo de minas que no había sido localizado por los zapadores donde fueron inmovilizados muchos de los nuevos blindados. Más de 36 Panther se quedaron parados frente a Cherkasskoye, objetivo inicial de la ofensiva y posición clave en las defensas soviéticas de primera línea. Los soviéticos descargaron un intenso fuego sobre los carros detenidos y sobre los ingenieros que trataban de abrir un pasillo a los Panther que todavía podían desplazarse. Mientras la Brigada de Decker estaba inmovilizada, la Grossdeutschland y la 11ª División Panzer, en el ala derecha del cuerpo, atacaban Cherkasskoye en formación de cuña, irrumpiendo rápidamente en la primera línea soviética y alcanzando a las 9.15 horas las afueras del pueblo. Para mantener dicha posición vital, la 67ª División de Fusileros de la Guardia fue reforzda por dos regimientos de cañones anticarro, produciéndose un sangriento combate, a lo largo de todo el día, al final del cual los soviéticos se retiraron del pueblo, dejándolo en manos alemanas. En el extremo izquierdo del cuerpo la 3º División Panzer combatió asimismo contra la tenaz resistencia ofrecida por la 71ª División de Fusileros de la Guardia. Apoyados por escuadrillas de Stuka, los panzers y la infantería de la 332ª División avanzaron lentamente sobre las líneas soviéticas, encontrando una tenaz y férrea resistencia. Al acabar la noche, pese a todo la 3ª División Panzer había alcanzado el río Pena y penetrado unos 10 kilómetros en las defensas soviéticas. A pesar de estos avances, las formidables defensas soviéticas y la tenaz resistencia de los soldados soviéticos se habían cobrado un gran número de bajas en las divisiones alemanas.
El mismo 5 de Julio el II Cuerpo Panzer de la SS de Hausser (1 SS Leibstandarte, 2 SS Das Reich y 3 SS Totenkopf) comenzaron su avance hacia Prokhorovka. Aunque no fueron reconvertidas totalmente en Divisiones Panzer hasta después de Kursk, estaban formidablemente equipadas y disponían de unos 340 tanques y 195 cañones autopropulsados de todos los tipos. Cada una de estas unidades contaba también con sus propias compañías de tanques Tiger. Conscientes del carácter de élite de estas formaciones, los soviéticos habían emplazado frente ellas una serie de fortificaciones profundamente escalonadas y ocupadas por las experimentadas 52ª División de Fusileros de la Guardia y la 375ª División de Fusileros.
Sobre las 4.00 el II Cuerpo Panzer de la SS comenzó su avance y una vez atravesados los campos minas previamente despejados por los zapadores, se desplegaron con su muy ensayada táctica de panzerkreil ( formación en cuña con los vehículos más fuertemente armados y blindados en punta del avance). Las divisiones rompieron la primera línea de defensa soviética relativamente rápido, considerando el gran número de carros soviéticos en la zona, pero como en las demás ocasiones, después de la primeras gananacias de terreno, las formidables defensas con innumerables posiciones anticarro, campos de minas y feroces cortinas de fuego artillero ralentizaron el avance. Al final del día, sin embargo el II Cuerpo Panzer SS haía logrado atravesar las defensas de la 52ª División de Fusileros de la Guardia y penetrado cerca de 20 kilómetros en el entramado defensivo soviético. En el ala derecha del cuerpo, cerca del ocaso, las unidades de asalto de la Totenkopf apoyadas por varios Tiger, tomaron un importante puesto de mando de la 69º Ejército en el pueblo de Yajontovo. Sin duda los 41 Tiger disponibles entre las tres divisiones del cuerpo dotaron a la panzerkreil de un gran poder destructivo. En el cielo, las oleadas de aviones de ataque a tierra despejaron un corredor para el avance las divisones de las SS. Encabezando los ataques había un cierto número de Ju 87G equipados con dos cañones de 37 mm bajo el mando del famoso piloto Hans Ulrich Rudel. Además de los Stuka, los FW 190 lanzaban bombas de fragmentación sobre las defensas soviéticas. A eso se sumaban los Hs 129 armados con un cañón ventral de 30 mm que utilizaban contra los blindados y posiciones de artillería. De esta manera, las aldeas fortificadas de Berezov, Gremuchi, Bykovo, Kozma-Demyanovka y Voznesenski, todas situadas en la línea de avance del Cuerpo SS, sucumbieron al asalto. Al atardecer el II Cuerpo Panzer SS estaba bien emplazado para explotar sus ganancias territoriales, pero las pérdidas habían sido grandes.
En sector correspondiente al Destacamento de Kempf, el progreso el primer día fue lento. Con tres divisiones panzer y el 503º Schwere Panzer Abteilung (48 Tiger), la misión de estas unidades era atravesar rápidamente las posiciones soviéticas en dirección a Korocha. Una vez allí atacaría y derrotaría a las reservas blindadas soviéticas que habían sido identificadas por el reconocimiento aéreo y de las que Hoth esperaba que atacasen el flanco derecho del II Cuerpo Panzer SS en su avance. Una vez se consiguiera aquel objetivo, el III Cuerpo Panzer (Breith) tendría que girar al noroeste y situarse en posición de ataque al flanco de 5º Ejército de Tanques de la Guardia de Rotmistrov cuando este chocase contra el II Cuerpo Panzer en las inmediaciones de Prokhorovka. En un feroz combate las unidades del 7º Ejército de la Guardia de Shumilov retuvieron a los blindados alemanes y a la infantería de apoyo cerca de los cruces del río Donets. Para reforzar a Shumilov y frenar el avance alemán, Vatutin (Comandante en Jefe del Frente de Voronezh) despachó a tres divisiones más de fusileros para cubrir cualquier posible avance alemán en dirección a Korocha.
Estaba claro que al final del primer día de la “Operación Ciudadela”, los alemanes habían hecho los movimientos fundamentales que marcarían el curso de lo que quedaba de la batalla.
A las 4.00 horas, el 4º Ejército Panzer pasó a la ofensiva en totalidad de los 50 kilómetros de su frente en Belgorod y Gertsovka. Los panzer rodaron por los pasillos abiertos en los campos de minas por los zapadores durante la noche. En total, 700 carros y cañones de asalto de dos cuerpos panzer lanzaron un puño de acero sobre el 6º Ejército de Guardias de Chistyakov, pero tales esperanzas se desvanecieron rápidamente ante la realidad de la enorme escala de las defensas soviéticas y de otros factores que escapaban al control de los planificadores de la ofensiva.
En el sector del XLVIII Cuerpo Panzer de von Knobelsdorff (4º Ejército Panzer), la clave para romper las defensas soviéticas a cada lado de Butovo y ejecutar un rápido avance hacia la orilla sur del río Pena era la concentración masiva de potencia de fuego con la que contaba la 10ª Brigada Panther, equipada con los nuevos Panther. Apenas concluido el bombardeo, los 200 Panther de la Brigada Decker avanzaron desde Butovo y casi inmediatamente se metieron en un campo de minas que no había sido localizado por los zapadores donde fueron inmovilizados muchos de los nuevos blindados. Más de 36 Panther se quedaron parados frente a Cherkasskoye, objetivo inicial de la ofensiva y posición clave en las defensas soviéticas de primera línea. Los soviéticos descargaron un intenso fuego sobre los carros detenidos y sobre los ingenieros que trataban de abrir un pasillo a los Panther que todavía podían desplazarse. Mientras la Brigada de Decker estaba inmovilizada, la Grossdeutschland y la 11ª División Panzer, en el ala derecha del cuerpo, atacaban Cherkasskoye en formación de cuña, irrumpiendo rápidamente en la primera línea soviética y alcanzando a las 9.15 horas las afueras del pueblo. Para mantener dicha posición vital, la 67ª División de Fusileros de la Guardia fue reforzda por dos regimientos de cañones anticarro, produciéndose un sangriento combate, a lo largo de todo el día, al final del cual los soviéticos se retiraron del pueblo, dejándolo en manos alemanas. En el extremo izquierdo del cuerpo la 3º División Panzer combatió asimismo contra la tenaz resistencia ofrecida por la 71ª División de Fusileros de la Guardia. Apoyados por escuadrillas de Stuka, los panzers y la infantería de la 332ª División avanzaron lentamente sobre las líneas soviéticas, encontrando una tenaz y férrea resistencia. Al acabar la noche, pese a todo la 3ª División Panzer había alcanzado el río Pena y penetrado unos 10 kilómetros en las defensas soviéticas. A pesar de estos avances, las formidables defensas soviéticas y la tenaz resistencia de los soldados soviéticos se habían cobrado un gran número de bajas en las divisiones alemanas.
El mismo 5 de Julio el II Cuerpo Panzer de la SS de Hausser (1 SS Leibstandarte, 2 SS Das Reich y 3 SS Totenkopf) comenzaron su avance hacia Prokhorovka. Aunque no fueron reconvertidas totalmente en Divisiones Panzer hasta después de Kursk, estaban formidablemente equipadas y disponían de unos 340 tanques y 195 cañones autopropulsados de todos los tipos. Cada una de estas unidades contaba también con sus propias compañías de tanques Tiger. Conscientes del carácter de élite de estas formaciones, los soviéticos habían emplazado frente ellas una serie de fortificaciones profundamente escalonadas y ocupadas por las experimentadas 52ª División de Fusileros de la Guardia y la 375ª División de Fusileros.
Sobre las 4.00 el II Cuerpo Panzer de la SS comenzó su avance y una vez atravesados los campos minas previamente despejados por los zapadores, se desplegaron con su muy ensayada táctica de panzerkreil ( formación en cuña con los vehículos más fuertemente armados y blindados en punta del avance). Las divisiones rompieron la primera línea de defensa soviética relativamente rápido, considerando el gran número de carros soviéticos en la zona, pero como en las demás ocasiones, después de la primeras gananacias de terreno, las formidables defensas con innumerables posiciones anticarro, campos de minas y feroces cortinas de fuego artillero ralentizaron el avance. Al final del día, sin embargo el II Cuerpo Panzer SS haía logrado atravesar las defensas de la 52ª División de Fusileros de la Guardia y penetrado cerca de 20 kilómetros en el entramado defensivo soviético. En el ala derecha del cuerpo, cerca del ocaso, las unidades de asalto de la Totenkopf apoyadas por varios Tiger, tomaron un importante puesto de mando de la 69º Ejército en el pueblo de Yajontovo. Sin duda los 41 Tiger disponibles entre las tres divisiones del cuerpo dotaron a la panzerkreil de un gran poder destructivo. En el cielo, las oleadas de aviones de ataque a tierra despejaron un corredor para el avance las divisones de las SS. Encabezando los ataques había un cierto número de Ju 87G equipados con dos cañones de 37 mm bajo el mando del famoso piloto Hans Ulrich Rudel. Además de los Stuka, los FW 190 lanzaban bombas de fragmentación sobre las defensas soviéticas. A eso se sumaban los Hs 129 armados con un cañón ventral de 30 mm que utilizaban contra los blindados y posiciones de artillería. De esta manera, las aldeas fortificadas de Berezov, Gremuchi, Bykovo, Kozma-Demyanovka y Voznesenski, todas situadas en la línea de avance del Cuerpo SS, sucumbieron al asalto. Al atardecer el II Cuerpo Panzer SS estaba bien emplazado para explotar sus ganancias territoriales, pero las pérdidas habían sido grandes.
En sector correspondiente al Destacamento de Kempf, el progreso el primer día fue lento. Con tres divisiones panzer y el 503º Schwere Panzer Abteilung (48 Tiger), la misión de estas unidades era atravesar rápidamente las posiciones soviéticas en dirección a Korocha. Una vez allí atacaría y derrotaría a las reservas blindadas soviéticas que habían sido identificadas por el reconocimiento aéreo y de las que Hoth esperaba que atacasen el flanco derecho del II Cuerpo Panzer SS en su avance. Una vez se consiguiera aquel objetivo, el III Cuerpo Panzer (Breith) tendría que girar al noroeste y situarse en posición de ataque al flanco de 5º Ejército de Tanques de la Guardia de Rotmistrov cuando este chocase contra el II Cuerpo Panzer en las inmediaciones de Prokhorovka. En un feroz combate las unidades del 7º Ejército de la Guardia de Shumilov retuvieron a los blindados alemanes y a la infantería de apoyo cerca de los cruces del río Donets. Para reforzar a Shumilov y frenar el avance alemán, Vatutin (Comandante en Jefe del Frente de Voronezh) despachó a tres divisiones más de fusileros para cubrir cualquier posible avance alemán en dirección a Korocha.
Estaba claro que al final del primer día de la “Operación Ciudadela”, los alemanes habían hecho los movimientos fundamentales que marcarían el curso de lo que quedaba de la batalla.
General Hermann Hoth observando el avance de las unidades del 4º Ejército Panzer.
Artillería de la Grossdeutschland abriendo fuego en la mañana del 5 de Julio sobre las posiciones soviéticas
Semiorugas y granaderos panzer del II SS Panzer Korps avanzando por la estepa.
Anticarro soviético de 57 mm.
-6-9 de Julio
La noche del 5 de Julio, Vatutin, comprendió que los alemanes habían hecho más progresos de los esperados.
La mayor amenaza provenía del II Cuerpo Panzer SS, que al anochecer había atravesado la primera línea de defensas y se aprestaba para atacar el día 6 al amanecer. La situación se consideró seria y el 1er Ejército de Carros de Katukov, con sus 640 carros, recibió la orden de dirigirse al sur junto con los 2º y 5º Cuerpos de Carros de la Guardia y situarse en la retaguardia del 6º Ejército de la Guardia de Chistyakov. Se decidió que ante el temible poder destructivo de los cañones de largo alcance de los Tiger, se enterraran numerosos T-34 y algunos KV-1 para bloquear el avance alemán hacia Oboyan.
En las primeras horas del día 6 una vez reabastecidas de munición y combustible la Leibstandarte y la Das Reich avanzaron hacia el norte, con los Tiger de ambas divisiones en punta, sumando un total de 120 carros en marcha por la carretera de Belgorod a Oboyan. En las proximidades de Yakovlevo, la Leibstandarte chocó con los carros de la 1º Brigada Acorazada de Guardias y comenzó una fiera batalla. Los Tiger se enfrentaron a los carros soviéticos y después de 1 hora de combate, 12 T-34 ardían y los demás fueron dispersados por el avance de los Tiger. Los carros alemanes, contando con apoyo aéreo, atravesaron las defensas soviéticas y las 11.00 horas habían desbordado al 155º Regimiento de Fusileros de la Guardia y abierto una importante brecha en la barrera defensiva soviética que cubría la carretera de Belgorod a Kursk. A mediodía el regimiento Der Führer de la Das Reich tomó la aldea de Luchki. La gran apertura de un agujero en las defensas del 6º Ejército de la Guardia fue aprovechada por Hausser para lanzar rápidamente sus panzer e infantería motorizada. Al acabar el 6 de julio, el Cuerpo Panzer SS se había instalado cómodamente en la segunda línea de defensa soviética.
En respuesta al avance alemán, el STAVKA envió el 2º y 10º Cuerpos de Carros al área de Prokhorovka y se repartieron órdenes para el despliegue del 5ª Ejército de Carros de la Guardia de Rotmistrov desde sus posiciones en el Frente de la Estepa. Esta orden suponía avanzar a marcha forzadas y reagruparse para entrar en acción en las proximidades de Prokhorovka el 9 de Julio. Aunque el avance las tropas alemanas parecía hacer progresos significativos en las defensas soviéticas no había duda del gran coste que estaban pagando, sobre todo en infantería. En la tarde del día 6 Vatutin informó personalmente a Stalin que unos 330 carros alemanes habían sido puestos fuera de combate en el sector del 6º Ejército de Guardias, aunque habían tenido que retroceder ante la presión de las fuerzas germanas.
El 7 de Julio fue un día de importantes progresos en todo el frente del 4º Ejército Panzer. Las divisiones Leibstandarte y Das Reich reanudaron el avance hacia Oboyan. Mientras en el frente del XLVIII Cuerpo Panzer (Von Knobersdorff) la 3ª y 11ª Divisiones Panzer, en conjunción con la Grossdeutschland atacaron al 3er Cuerpo Mecanizado y al 31º Acorazado del 1er Ejército de Carros de la Guardia de Katukov. El día anterior durante gran parte de la noche del día 6, todas la unidades del XLVIII Cuerpo Panzer se vieron envueltas en feroces combates cuando asaltaron la segunda línea de defensa formada por T-34 enterrados, cañones anticarro y lanzallamas. Con el apoyo de los carros y cañones de asalto, la infantería alemana abrió pasillos a través de los campos de minas, luchando cuerpo a cuerpo por su objetivo. Los contendientes se enzarzaron entre sí sobre el terrero convertido en un lodazal por las intermitentes tormentas que desbordaron los numerosos pequeños torrentes que surcaban el terreno.
Con las primeras luces del día 7, los blindados del XLVIII Cuerpo Panzer, apoyados por artillería pesada, reanudaron su avance atacando las posiciones soviéticas entre Syrtsevo y Yakovlevo. Dubrova fue tomada al asalto. La presión alemana terminó rompiendo el frente de las unidades del 6º Ejército de la Guardia, que empezó a retirarse en desorden. Sin embargo cuando avanzó el día, los soviéticos pidieron apoyo aéreo y los blindados alemanes fueron sometidos a un intenso bombardeo por parte de la aviación soviética, al tiempo que aparecían más carros soviéticos que aprovechaban la pérdida de la supremacía aérea de la Luftwaffe. No obstante, la presión alemana comenzaba a surtir efecto y los soviéticos estaban siendo empujados hacia Syrtsevo, último bastión que guardaba la línea de defensa antes de Oboyan. La 11ª División Panzer había alcanzado la zona norte del pueblo y ahora se situaba a caballo de la carretera Belgorod-Kursk hacia el este. La Grossdeutschland consiguió conquistar las colinas situadas a cada lado de Syrtsevo haciendo frente a una tenaz resistencia. Un intento de la Brigada Panther de tomar el pueblo en un asalto frontal fue detenido en los campos de minas, donde sufrieron el castigo de las defensas anticarro. Aun así, la posición soviética se volvió muy precaria ante la presión de las fuerzas germanas.
Los logros del XLVIII Cuerpo Panzer el día 7 de Julio se vieron acompañados por el éxito del II Cuerpo Panzer SS. El objetivo inicial de este último era el pueblo de Teterevino, donde el reconocimiento aéreo había avisado de la presencia de blindados soviéticos. Precedidos por aviones de ataque a tierra (los Henschel Hs 129 de Meyer y los FW 190 de DruschelI), los carros avanzaron hacia Teterevino. Atravesando las defensas exteriores, los panzer se enzarzaron en un feroz combate con los carros y las posiciones de cañones anticarros soviéticos. A través de los huecos abiertos por los Tiger un grupo de asalto tomó el pueblo, capturando el puesto de mando y plana mayor de una brigada de fusileros. La caída de Teterevino y el subsiguiente avance la Leibstandarte y la Totenkopf hacia Greznoye permitieron al II Cuerpo Panzer SS romper las últimas líneas soviéticas frente al río Psel. Al mismo tiempo otras unidades del II Cuerpo Panzer SS giraron hacia el noreste y empezaron a avanzar hacia Prokhorovka. Mientras las unidades avanzaban la Feldpolizei llegó para reunir a los numerosos prisioneros y conducirlos hacia la retaguardia, en una imagen que recordaba a otros tiempos de la campaña del Frente Oriental. El frente del 6º Ejército de Guardias estaba destrozado y había un peligro real de que los alemanes pudieran alcanzar Oboyan.
En ese momento las posiciones soviéticas en la totalidad del frente sur estaban seriamente amenazadas. La continua presión alemana sobre el 6º Ejército de la Guardia provocaba que incluso las unidades de refuerzo enviadas para tapar los huecos se fundieran en la intensidad de la batalla. Durante una reunión esa tarde Vatutin y Jruschev (Comisario del Pueblo adjunto a Vatutin) tomaron la decisión de enviar unidades de refresco para reforzar el frente e impedir a toda costa el avance alemán sobre Oboyan. El 40º Ejército de Moskalenko fue desplegado para apoyar al 1er Ejército de Carros y al 6º Ejército de Carros de la Guardia. Se ordenaron dos contraataques dirigidos hacia el 4º Ejército Panzer para aliviar la presión sobre las unidades que cubrían los accesos a Oboyan. Durante toda la noche del día 7 fluyeron órdenes y divisiones de infantería y carros se aprestaron para las operaciones del siguiente día.
Al amanecer del 8 de Julio, los alemanes reanudaron su avance, con la Grossdeutchsland presionando para tomar Syrtsevo. A última hora de la mañana, unos 40 T-34 del Cuerpo Mecanizado de Krivoshein salieron de Syrtsevo en un intento desesperado por detener el avance alemán, pero se pusieron a tiro de la compañía Tiger de la Grossdeutschland, y en la batalla que siguió, 10 tanques soviéticos fueron puestos fuera combate y los restantes abandonaron el campo de batalla ante el impetuoso avance alemán. En Syrtsevo, los defensores comenzaban a flaquear al tiempo que unidades de la Grossdeutschland y la 3ª División Panzer adelantaron sus posiciones para presionar a los defensores. Poco después del mediodía, el pueblo cayó en manos alemanas y los soviéticos fueron empujados más allá del río Pena. Una rápida penetración del batallón de reconocimiento divisionario, apoyado por el batallón de cañones de asalto, se aproximó al pueblo de Verjopenye. La importancia de esta población residía en su puente sobre el río Pena, que los soviéticos estaban decididos a retener. Se lanzó contra los alemanes un ataque con al menos 40 T-34 y M-3 Lee, y en la batalla de 3 horas que siguió los cañones de asalto alemanes contabilizaron, al menos 35 carros soviéticos destruidos.
Anteriormente al final del 7 de julio, el comandante del 2º Cuerpo de Carros de la Guardia recibió la orden de reunir una fuerza acorazada con apoyo de infantería que atacara en dirección oeste, desde su posición en un bosque en torno al pueblo de Gostishchevo. Su misión era presionar en profundidad sobre el flanco del Cuerpo Panzer SS, con la intención de cortar sus líneas de abastecimiento. Por casualidad esa fuerza soviética fue avistada por una patrulla de reconocimiento compuesta por aviones Henschel Hs 129 capitaneada por el capitán Meyer. Con los cañones de 30 mm los Henschel causaron una devastación entre los T-34. También llegaron en su apoyo los FW 190 de la formación de combate Druschel, lanzando bombas antipersona contra la infantería. En una hora, los restos destrozados de 50 T-34 se esparcían por el terreno.
Durante ese día y el siguiente, el 4º Ejército Panzer lanzó ataques sucesivo en las proximidades de Oboyan, descargando poderosos golpes acorazados sobre el 1er Ejército de Carros y el 6º de la Guardia, que la tarde del día 8, estaban siendo reforzados por la reserva de la STAVKA.
A primera hora de la mañana del 9 de Julio, Hoth lanzó un ataque con más de 500 carros a lo largo del frente de 15 kilómetros que iba de Verjonenye a Solotino. Desplegándose en cuñas de entre 60 y 100 panzer, con los Tiger en punta, los alemanes se lanzaron una vez más contra los blindados del 1er Ejército de Carros y los fusileros del 6º de la Guardia. Por la tarde habían conseguido, con un alto coste en blindados y hombres, empujar las líneas soviéticas hasta sólo 19 kilómetros de Oboyan. Las pérdidas alemanas fueron muy severas. A la Grossdeutschland solo le quedaron 100 carros operativos al finalizar el día. Al atardecer del 9 Julio, Hoth comenzó a reagrupar sus fuerzas a medida que el eje del asalto del 4º Ejército Panzer se desplazaba hacia el noroeste, desde Oboyan hacia Prokhorovka. Los movimientos se encaminaban hacia lo que en pocos días sería el choque entre dos poderosas formaciones acorazadas.
El de 5 Julio por la noche, las divisiones del III Cuerpo Panzer de Breith (Destacamento de Kempf) fueron desplegadas en la retaguardia de la 7ª División Panzer. Al amanecer del 6 de Julio, la 19ª División Panzer, apoyada por una parte importante del 168ª División, avanzó contra las alturas del noroeste de Belgorod fuertemente defendidas por el 7º Ejército de la Guardia de Shumilov. Un duro combate se mantuvo allí durante los siguientes tres días, con los alemanes presionando sobre las fuerzas soviéticas, pero fue solo cuando las Divisiones Panzer 6º y 19ª, actuando en conjunto, consiguieron romper el frente en dirección a Melijovo, desalojando por fin a las unidades del Ejército Rojo de las alturas de Belgorod. El despliegue de los blindados alemanes se caracterizó por una gran fluidez, eliminándose la separación entre las divisiones y coordinándose los movimientos cuando era necesario para atacar las camufladas posiciones soviéticas en las cimas. Ambas unidades blindadas consiguieron rodear y destruir dos divisiones soviéticas de fusileros. Entretanto el general Breith tomó la decisión de abandonar el plan original de avanzar hacia el este y tomar Korocha. Las defensas soviéticas al este del Donets bloqueaban el avance hacia Korocha y decidió no perder el tiempo y esfuerzos en intentar romperlas. Para apoyar el avance del II SS Cuerpo Panzer hacia Prokhorovka, Breith ordenó a la 7ª División Panzer atravesar las líneas soviéticas y marchar progresivamente hacia Prokhorovka. Como eje del avance de la totalidad del cuerpo se desplazó hacia el norte, las unidades soviéticas que antes defendían comenzaron una serie de fuertes ataques a todo lo largo del extendido flanco del III Cuerpo Panzer. Al sur del avance principal, el flanco se mantuvo gracias a una serie de acciones de bloqueo emprendidas por las 106ª y 320ª Divisiones de Infantería (XI Cuerpo de Raus) que causaron graves daños a las tropas soviéticas que intentaban penetrar en la retaguardia de las líneas alemanas. A medida que progresaba la batalla, la 7ª División Panzer se encontró actuando cada vez más como una protección móvil del flanco, haciendo de pantalla del avance hacia el norte de la 6ª División Panzer. Pero aunque el III Cuerpo Panzer estaba obteniendo éxito en su avance hacia el norte, todavía proseguían los combates con las líneas de la defensa soviética. Por la tarde del día 9 de Julio cuando Hoth reagrupaba a las fuerzas del 4º Ejército Panzer para lanzarlas hacia Prokhorovka, las primeras unidades de la vanguardia del 5º Ejército de Carros de la Guardia se estaban moviendo hacia sus puntos de reunión al noroeste de la aldea.
La mayor amenaza provenía del II Cuerpo Panzer SS, que al anochecer había atravesado la primera línea de defensas y se aprestaba para atacar el día 6 al amanecer. La situación se consideró seria y el 1er Ejército de Carros de Katukov, con sus 640 carros, recibió la orden de dirigirse al sur junto con los 2º y 5º Cuerpos de Carros de la Guardia y situarse en la retaguardia del 6º Ejército de la Guardia de Chistyakov. Se decidió que ante el temible poder destructivo de los cañones de largo alcance de los Tiger, se enterraran numerosos T-34 y algunos KV-1 para bloquear el avance alemán hacia Oboyan.
En las primeras horas del día 6 una vez reabastecidas de munición y combustible la Leibstandarte y la Das Reich avanzaron hacia el norte, con los Tiger de ambas divisiones en punta, sumando un total de 120 carros en marcha por la carretera de Belgorod a Oboyan. En las proximidades de Yakovlevo, la Leibstandarte chocó con los carros de la 1º Brigada Acorazada de Guardias y comenzó una fiera batalla. Los Tiger se enfrentaron a los carros soviéticos y después de 1 hora de combate, 12 T-34 ardían y los demás fueron dispersados por el avance de los Tiger. Los carros alemanes, contando con apoyo aéreo, atravesaron las defensas soviéticas y las 11.00 horas habían desbordado al 155º Regimiento de Fusileros de la Guardia y abierto una importante brecha en la barrera defensiva soviética que cubría la carretera de Belgorod a Kursk. A mediodía el regimiento Der Führer de la Das Reich tomó la aldea de Luchki. La gran apertura de un agujero en las defensas del 6º Ejército de la Guardia fue aprovechada por Hausser para lanzar rápidamente sus panzer e infantería motorizada. Al acabar el 6 de julio, el Cuerpo Panzer SS se había instalado cómodamente en la segunda línea de defensa soviética.
En respuesta al avance alemán, el STAVKA envió el 2º y 10º Cuerpos de Carros al área de Prokhorovka y se repartieron órdenes para el despliegue del 5ª Ejército de Carros de la Guardia de Rotmistrov desde sus posiciones en el Frente de la Estepa. Esta orden suponía avanzar a marcha forzadas y reagruparse para entrar en acción en las proximidades de Prokhorovka el 9 de Julio. Aunque el avance las tropas alemanas parecía hacer progresos significativos en las defensas soviéticas no había duda del gran coste que estaban pagando, sobre todo en infantería. En la tarde del día 6 Vatutin informó personalmente a Stalin que unos 330 carros alemanes habían sido puestos fuera de combate en el sector del 6º Ejército de Guardias, aunque habían tenido que retroceder ante la presión de las fuerzas germanas.
El 7 de Julio fue un día de importantes progresos en todo el frente del 4º Ejército Panzer. Las divisiones Leibstandarte y Das Reich reanudaron el avance hacia Oboyan. Mientras en el frente del XLVIII Cuerpo Panzer (Von Knobersdorff) la 3ª y 11ª Divisiones Panzer, en conjunción con la Grossdeutschland atacaron al 3er Cuerpo Mecanizado y al 31º Acorazado del 1er Ejército de Carros de la Guardia de Katukov. El día anterior durante gran parte de la noche del día 6, todas la unidades del XLVIII Cuerpo Panzer se vieron envueltas en feroces combates cuando asaltaron la segunda línea de defensa formada por T-34 enterrados, cañones anticarro y lanzallamas. Con el apoyo de los carros y cañones de asalto, la infantería alemana abrió pasillos a través de los campos de minas, luchando cuerpo a cuerpo por su objetivo. Los contendientes se enzarzaron entre sí sobre el terrero convertido en un lodazal por las intermitentes tormentas que desbordaron los numerosos pequeños torrentes que surcaban el terreno.
Con las primeras luces del día 7, los blindados del XLVIII Cuerpo Panzer, apoyados por artillería pesada, reanudaron su avance atacando las posiciones soviéticas entre Syrtsevo y Yakovlevo. Dubrova fue tomada al asalto. La presión alemana terminó rompiendo el frente de las unidades del 6º Ejército de la Guardia, que empezó a retirarse en desorden. Sin embargo cuando avanzó el día, los soviéticos pidieron apoyo aéreo y los blindados alemanes fueron sometidos a un intenso bombardeo por parte de la aviación soviética, al tiempo que aparecían más carros soviéticos que aprovechaban la pérdida de la supremacía aérea de la Luftwaffe. No obstante, la presión alemana comenzaba a surtir efecto y los soviéticos estaban siendo empujados hacia Syrtsevo, último bastión que guardaba la línea de defensa antes de Oboyan. La 11ª División Panzer había alcanzado la zona norte del pueblo y ahora se situaba a caballo de la carretera Belgorod-Kursk hacia el este. La Grossdeutschland consiguió conquistar las colinas situadas a cada lado de Syrtsevo haciendo frente a una tenaz resistencia. Un intento de la Brigada Panther de tomar el pueblo en un asalto frontal fue detenido en los campos de minas, donde sufrieron el castigo de las defensas anticarro. Aun así, la posición soviética se volvió muy precaria ante la presión de las fuerzas germanas.
Los logros del XLVIII Cuerpo Panzer el día 7 de Julio se vieron acompañados por el éxito del II Cuerpo Panzer SS. El objetivo inicial de este último era el pueblo de Teterevino, donde el reconocimiento aéreo había avisado de la presencia de blindados soviéticos. Precedidos por aviones de ataque a tierra (los Henschel Hs 129 de Meyer y los FW 190 de DruschelI), los carros avanzaron hacia Teterevino. Atravesando las defensas exteriores, los panzer se enzarzaron en un feroz combate con los carros y las posiciones de cañones anticarros soviéticos. A través de los huecos abiertos por los Tiger un grupo de asalto tomó el pueblo, capturando el puesto de mando y plana mayor de una brigada de fusileros. La caída de Teterevino y el subsiguiente avance la Leibstandarte y la Totenkopf hacia Greznoye permitieron al II Cuerpo Panzer SS romper las últimas líneas soviéticas frente al río Psel. Al mismo tiempo otras unidades del II Cuerpo Panzer SS giraron hacia el noreste y empezaron a avanzar hacia Prokhorovka. Mientras las unidades avanzaban la Feldpolizei llegó para reunir a los numerosos prisioneros y conducirlos hacia la retaguardia, en una imagen que recordaba a otros tiempos de la campaña del Frente Oriental. El frente del 6º Ejército de Guardias estaba destrozado y había un peligro real de que los alemanes pudieran alcanzar Oboyan.
En ese momento las posiciones soviéticas en la totalidad del frente sur estaban seriamente amenazadas. La continua presión alemana sobre el 6º Ejército de la Guardia provocaba que incluso las unidades de refuerzo enviadas para tapar los huecos se fundieran en la intensidad de la batalla. Durante una reunión esa tarde Vatutin y Jruschev (Comisario del Pueblo adjunto a Vatutin) tomaron la decisión de enviar unidades de refresco para reforzar el frente e impedir a toda costa el avance alemán sobre Oboyan. El 40º Ejército de Moskalenko fue desplegado para apoyar al 1er Ejército de Carros y al 6º Ejército de Carros de la Guardia. Se ordenaron dos contraataques dirigidos hacia el 4º Ejército Panzer para aliviar la presión sobre las unidades que cubrían los accesos a Oboyan. Durante toda la noche del día 7 fluyeron órdenes y divisiones de infantería y carros se aprestaron para las operaciones del siguiente día.
Al amanecer del 8 de Julio, los alemanes reanudaron su avance, con la Grossdeutchsland presionando para tomar Syrtsevo. A última hora de la mañana, unos 40 T-34 del Cuerpo Mecanizado de Krivoshein salieron de Syrtsevo en un intento desesperado por detener el avance alemán, pero se pusieron a tiro de la compañía Tiger de la Grossdeutschland, y en la batalla que siguió, 10 tanques soviéticos fueron puestos fuera combate y los restantes abandonaron el campo de batalla ante el impetuoso avance alemán. En Syrtsevo, los defensores comenzaban a flaquear al tiempo que unidades de la Grossdeutschland y la 3ª División Panzer adelantaron sus posiciones para presionar a los defensores. Poco después del mediodía, el pueblo cayó en manos alemanas y los soviéticos fueron empujados más allá del río Pena. Una rápida penetración del batallón de reconocimiento divisionario, apoyado por el batallón de cañones de asalto, se aproximó al pueblo de Verjopenye. La importancia de esta población residía en su puente sobre el río Pena, que los soviéticos estaban decididos a retener. Se lanzó contra los alemanes un ataque con al menos 40 T-34 y M-3 Lee, y en la batalla de 3 horas que siguió los cañones de asalto alemanes contabilizaron, al menos 35 carros soviéticos destruidos.
Anteriormente al final del 7 de julio, el comandante del 2º Cuerpo de Carros de la Guardia recibió la orden de reunir una fuerza acorazada con apoyo de infantería que atacara en dirección oeste, desde su posición en un bosque en torno al pueblo de Gostishchevo. Su misión era presionar en profundidad sobre el flanco del Cuerpo Panzer SS, con la intención de cortar sus líneas de abastecimiento. Por casualidad esa fuerza soviética fue avistada por una patrulla de reconocimiento compuesta por aviones Henschel Hs 129 capitaneada por el capitán Meyer. Con los cañones de 30 mm los Henschel causaron una devastación entre los T-34. También llegaron en su apoyo los FW 190 de la formación de combate Druschel, lanzando bombas antipersona contra la infantería. En una hora, los restos destrozados de 50 T-34 se esparcían por el terreno.
Durante ese día y el siguiente, el 4º Ejército Panzer lanzó ataques sucesivo en las proximidades de Oboyan, descargando poderosos golpes acorazados sobre el 1er Ejército de Carros y el 6º de la Guardia, que la tarde del día 8, estaban siendo reforzados por la reserva de la STAVKA.
A primera hora de la mañana del 9 de Julio, Hoth lanzó un ataque con más de 500 carros a lo largo del frente de 15 kilómetros que iba de Verjonenye a Solotino. Desplegándose en cuñas de entre 60 y 100 panzer, con los Tiger en punta, los alemanes se lanzaron una vez más contra los blindados del 1er Ejército de Carros y los fusileros del 6º de la Guardia. Por la tarde habían conseguido, con un alto coste en blindados y hombres, empujar las líneas soviéticas hasta sólo 19 kilómetros de Oboyan. Las pérdidas alemanas fueron muy severas. A la Grossdeutschland solo le quedaron 100 carros operativos al finalizar el día. Al atardecer del 9 Julio, Hoth comenzó a reagrupar sus fuerzas a medida que el eje del asalto del 4º Ejército Panzer se desplazaba hacia el noroeste, desde Oboyan hacia Prokhorovka. Los movimientos se encaminaban hacia lo que en pocos días sería el choque entre dos poderosas formaciones acorazadas.
El de 5 Julio por la noche, las divisiones del III Cuerpo Panzer de Breith (Destacamento de Kempf) fueron desplegadas en la retaguardia de la 7ª División Panzer. Al amanecer del 6 de Julio, la 19ª División Panzer, apoyada por una parte importante del 168ª División, avanzó contra las alturas del noroeste de Belgorod fuertemente defendidas por el 7º Ejército de la Guardia de Shumilov. Un duro combate se mantuvo allí durante los siguientes tres días, con los alemanes presionando sobre las fuerzas soviéticas, pero fue solo cuando las Divisiones Panzer 6º y 19ª, actuando en conjunto, consiguieron romper el frente en dirección a Melijovo, desalojando por fin a las unidades del Ejército Rojo de las alturas de Belgorod. El despliegue de los blindados alemanes se caracterizó por una gran fluidez, eliminándose la separación entre las divisiones y coordinándose los movimientos cuando era necesario para atacar las camufladas posiciones soviéticas en las cimas. Ambas unidades blindadas consiguieron rodear y destruir dos divisiones soviéticas de fusileros. Entretanto el general Breith tomó la decisión de abandonar el plan original de avanzar hacia el este y tomar Korocha. Las defensas soviéticas al este del Donets bloqueaban el avance hacia Korocha y decidió no perder el tiempo y esfuerzos en intentar romperlas. Para apoyar el avance del II SS Cuerpo Panzer hacia Prokhorovka, Breith ordenó a la 7ª División Panzer atravesar las líneas soviéticas y marchar progresivamente hacia Prokhorovka. Como eje del avance de la totalidad del cuerpo se desplazó hacia el norte, las unidades soviéticas que antes defendían comenzaron una serie de fuertes ataques a todo lo largo del extendido flanco del III Cuerpo Panzer. Al sur del avance principal, el flanco se mantuvo gracias a una serie de acciones de bloqueo emprendidas por las 106ª y 320ª Divisiones de Infantería (XI Cuerpo de Raus) que causaron graves daños a las tropas soviéticas que intentaban penetrar en la retaguardia de las líneas alemanas. A medida que progresaba la batalla, la 7ª División Panzer se encontró actuando cada vez más como una protección móvil del flanco, haciendo de pantalla del avance hacia el norte de la 6ª División Panzer. Pero aunque el III Cuerpo Panzer estaba obteniendo éxito en su avance hacia el norte, todavía proseguían los combates con las líneas de la defensa soviética. Por la tarde del día 9 de Julio cuando Hoth reagrupaba a las fuerzas del 4º Ejército Panzer para lanzarlas hacia Prokhorovka, las primeras unidades de la vanguardia del 5º Ejército de Carros de la Guardia se estaban moviendo hacia sus puntos de reunión al noroeste de la aldea.
Tanques T-34 se dirigen hacia el frente para reforzar sus líneas
Granaderos de la Grossdeutschland avanzando hacia Syrtsevo.
StuG III de la Das Reich, avanzando por la estepa bajo fuego enemigo
Tanques del II SS Cuerpo Panzer avanzando por la estapa en formación de ataque.
Panthers de la 10ª Brigada Panzer, durante un alto en los combates.
-10 de Julio
Aunque el 10 de Julio del XLVIII Cuerpo Panzer Von Knobelsdorff mantuvo una dura presión sobre los restos del 6º Ejército de la Guardia y mermado gravemente al 1er Ejército de Carros , que cubrían los accesos a Oboyan, el planteamiento de Hoth era distraer a los soviéticos con esta operación y ocultar la separación del II Cuerpo Panzer SS que, después de reagruparse rápidamente, desplazaría su eje de avance hacia el noroeste y Prokhorovka. A pesar de los duros combates entre las divisones del Cuerpo Panzer XLVIII y las fuerzas soviéticas en el oeste, Vatutin sospechaba las intenciones de Hoth.
El 10 de julio, la División SS Totenkopf, al mando del Mayor General SS Hermann Priess, había establecido una cabeza de puente sobre el Psel al oeste de Prokhorovka después de limpiar los últimos búnkeres soviéticos.
Pese al intenso fuego soviético, los hombres de la Totenkopf avanzaron, y al caer la noche habían conseguido dominar el puebo de Krasny Oktiabr. Una vez asegurado el cruce del Psel, y con los puentes tendidos la opción de dirigirse hacia el norte y entrar en la retaguardia de las posiciones soviéticas era viable. Aunque agotadas y debilitadas por cinco días de duros combates las divisiones de las SS aún estaban en condiciones de desplegar un gran número de carros y cañones de asalto para el próximo ataque.
A primera hora de la tarde del 10 de Julio, Vatutin recibió la información de que la cota 244’8 en el camino a Oboyan, había sido tomada por la 11ª División Panzer. La conquista de esta posición marcó el punto más norte alcanzado por la penetración alemana en el sur del saliente y supuso el clímax de un exitoso día para el XLVIII Cuerpo Panzer. Después de reparar el dañado puente de Verjopenye construir en la noche del 9 al 10 otro puente capaz de ser utilizado por vehículos de cadenas, la 3ª División Panzer estaba lista para cruzar el río Pena y atacar rápidamente a las unidades del Cuerpo Mecanizado de Krivoshein en las alturas de Berezovka. Con la 332ª División de Infantería avanzando desde el sur, la resistencia se hundió. Al final del día 11, la curva del Pena había sido despejada y las líneas alemanas se habían movido hacia el oeste. Sin embargo, a medida que eje principal del avance alemán se desplazaba desde Oboyan a Prokhorovka y se incorporaban más unidades soviéticas al combate, el XLVIII Cuerpo Panzer fue encontrándose con defensas cada vez más reforzadas y con frecuentes contraataques. A pesar de estos pequeños avances, la línea de este sector del frente del 4º Ejército Panzer, permanecería casi como estaba el día 11 hasta la retirada alemana algunos días más tarde.
Otro hecho significativo del que ocurriría el mismo 10 de Julio, fue el desembarco en Sicilia, a miles de kilómetros de Kursk, de un contingente angloamericano de 160.000 hombres. Ocurría aquello que habían temido los generales alemanes y contra lo que había advertido el Mariscal Von Manstein. El OKW (Alto Mando de la Wehrmacht) se limitó a informar flemáticamente del asunto, anunciando que la “Operación Ciudadela” continuaba. Sin embargo no pasaría mucho tiempo antes de que las consecuencias del desembarco aliado en Sicilia (Operación Husky) tuvieran un impacto en la ofensiva alemana en Kursk.
El 10 de julio, la División SS Totenkopf, al mando del Mayor General SS Hermann Priess, había establecido una cabeza de puente sobre el Psel al oeste de Prokhorovka después de limpiar los últimos búnkeres soviéticos.
Pese al intenso fuego soviético, los hombres de la Totenkopf avanzaron, y al caer la noche habían conseguido dominar el puebo de Krasny Oktiabr. Una vez asegurado el cruce del Psel, y con los puentes tendidos la opción de dirigirse hacia el norte y entrar en la retaguardia de las posiciones soviéticas era viable. Aunque agotadas y debilitadas por cinco días de duros combates las divisiones de las SS aún estaban en condiciones de desplegar un gran número de carros y cañones de asalto para el próximo ataque.
A primera hora de la tarde del 10 de Julio, Vatutin recibió la información de que la cota 244’8 en el camino a Oboyan, había sido tomada por la 11ª División Panzer. La conquista de esta posición marcó el punto más norte alcanzado por la penetración alemana en el sur del saliente y supuso el clímax de un exitoso día para el XLVIII Cuerpo Panzer. Después de reparar el dañado puente de Verjopenye construir en la noche del 9 al 10 otro puente capaz de ser utilizado por vehículos de cadenas, la 3ª División Panzer estaba lista para cruzar el río Pena y atacar rápidamente a las unidades del Cuerpo Mecanizado de Krivoshein en las alturas de Berezovka. Con la 332ª División de Infantería avanzando desde el sur, la resistencia se hundió. Al final del día 11, la curva del Pena había sido despejada y las líneas alemanas se habían movido hacia el oeste. Sin embargo, a medida que eje principal del avance alemán se desplazaba desde Oboyan a Prokhorovka y se incorporaban más unidades soviéticas al combate, el XLVIII Cuerpo Panzer fue encontrándose con defensas cada vez más reforzadas y con frecuentes contraataques. A pesar de estos pequeños avances, la línea de este sector del frente del 4º Ejército Panzer, permanecería casi como estaba el día 11 hasta la retirada alemana algunos días más tarde.
Otro hecho significativo del que ocurriría el mismo 10 de Julio, fue el desembarco en Sicilia, a miles de kilómetros de Kursk, de un contingente angloamericano de 160.000 hombres. Ocurría aquello que habían temido los generales alemanes y contra lo que había advertido el Mariscal Von Manstein. El OKW (Alto Mando de la Wehrmacht) se limitó a informar flemáticamente del asunto, anunciando que la “Operación Ciudadela” continuaba. Sin embargo no pasaría mucho tiempo antes de que las consecuencias del desembarco aliado en Sicilia (Operación Husky) tuvieran un impacto en la ofensiva alemana en Kursk.
Tropas de la Grossdeutschland manejando un antitanque de 75mm.
Soldados soviéticos en una posición capturada a los alemanes.
-11 de Julio
Al sur del II Cuerpo Panzer SS, las 3 divisiones panzer del Destacamento de Kempf apoyadas por brigadas de cañones de asalto y Tiger del Schwere Panzer Abteilung 503, comenzaron su avance hacia el norte al amanecer del 11 de Julio. Las unidades de Kempf consiguieron avanzar a través de la línea soviética entre Melijovo y la estación de Sasnoye. Cuando finalmente consiguieron salir a campo abierto, las 3 divsiones panzer procedieron a asaltar las posiciones soviéticas al sur de Prokhorovka con tal éxito que la resistencia que había frente al III Cuerpo Panzer de Breith se desplomó. Cuando anochecía el día 11, unos 300 carros se aproximaban hacia Prokhorovka desde el sur.
Durante la tarde del 11 de julio, Hausser organizó a sus divisiones para un asalto sobre Prokhorovka. La Totenkopf ocuparía el flanco izquierdo del Cuerpo, mientras que la Leibstandarte, al mando del Mayor General SS Theodore Wisch, estaría en el centro, agrupada al oeste de la ciudad entre la línea ferroviaria y el Psel. La Das Reich, al mando del Teniente General SS Walter Krüger, atacaría por el flanco derecho del Cuerpo, que estaba a varios kilómetros al sudoeste de Prokhorovka.
Mientras las divisiones SS de Hausser se preparaban para la batalla, también había una febril actividad en el bando soviético. Los carros del 5º Ejército de la Guardia de Rotmistrov y los fusileros marcharon directamente al combate librando una dura batalla defensiva en la que rechazaron a los blindados alemanes. A pesar de este alivio momentáneo, los soviéticos se enfrentaban a una situación de claro peligro potencial. Si esperaban hasta que el 1er Ejército de Carros de la Guardia y el 6º Ejército de la Guardia estuvieran del todo aprovisionados y a que el 5º Ejército de la Guardia de Zhadov se encontrase adecuadamente desplegado antes de iniciar la contraofensiva contras las diviones de la SS de Hausser, darían tiempo a los 300 carros y cañones de asalto del Destacamento de Kempf para alcanzar Prokhorovka. Con una masa de blindados que sumaban casi 900 máquinas acercándose al pueblo desde el oeste (II Cuerpo Panzer SS ) y desde el sur (III Cuerpo Panzer del Destacamento de Kempf), la posición soviética podría hundirse con resultados catastróficos. Vatutin, ordenó a Rotmistrov que se preparase a su 5º Ejército de Carros de la Guardia para un contraataque inmediato contra el II Cuerpo Panzer SS el 12 Julio. Además ordenó a la 11ª y 12ª Brigadas Mecanizadas del 5º Cuerpo Mecanizado de la Guardia, junto con la 26ª Brigada Acorazada del 2º Cuerpo de la Guardia y la 92ª División de Fusileros de la Guardia, contraatacar y bloquear a cualquier coste el avance del III Cuerpo Panzer. Durante la noche las tripulaciones de los carros de ambos bandos se ocuparon de las tareas de municionamiento y repostaje de sus máquinas para la gran prueba que les esperaba.
Durante la tarde del 11 de julio, Hausser organizó a sus divisiones para un asalto sobre Prokhorovka. La Totenkopf ocuparía el flanco izquierdo del Cuerpo, mientras que la Leibstandarte, al mando del Mayor General SS Theodore Wisch, estaría en el centro, agrupada al oeste de la ciudad entre la línea ferroviaria y el Psel. La Das Reich, al mando del Teniente General SS Walter Krüger, atacaría por el flanco derecho del Cuerpo, que estaba a varios kilómetros al sudoeste de Prokhorovka.
Mientras las divisiones SS de Hausser se preparaban para la batalla, también había una febril actividad en el bando soviético. Los carros del 5º Ejército de la Guardia de Rotmistrov y los fusileros marcharon directamente al combate librando una dura batalla defensiva en la que rechazaron a los blindados alemanes. A pesar de este alivio momentáneo, los soviéticos se enfrentaban a una situación de claro peligro potencial. Si esperaban hasta que el 1er Ejército de Carros de la Guardia y el 6º Ejército de la Guardia estuvieran del todo aprovisionados y a que el 5º Ejército de la Guardia de Zhadov se encontrase adecuadamente desplegado antes de iniciar la contraofensiva contras las diviones de la SS de Hausser, darían tiempo a los 300 carros y cañones de asalto del Destacamento de Kempf para alcanzar Prokhorovka. Con una masa de blindados que sumaban casi 900 máquinas acercándose al pueblo desde el oeste (II Cuerpo Panzer SS ) y desde el sur (III Cuerpo Panzer del Destacamento de Kempf), la posición soviética podría hundirse con resultados catastróficos. Vatutin, ordenó a Rotmistrov que se preparase a su 5º Ejército de Carros de la Guardia para un contraataque inmediato contra el II Cuerpo Panzer SS el 12 Julio. Además ordenó a la 11ª y 12ª Brigadas Mecanizadas del 5º Cuerpo Mecanizado de la Guardia, junto con la 26ª Brigada Acorazada del 2º Cuerpo de la Guardia y la 92ª División de Fusileros de la Guardia, contraatacar y bloquear a cualquier coste el avance del III Cuerpo Panzer. Durante la noche las tripulaciones de los carros de ambos bandos se ocuparon de las tareas de municionamiento y repostaje de sus máquinas para la gran prueba que les esperaba.
Prisioneros soviéticos capturados por las unidades del 4º Ejército Panzer, marchan hacia el cautiverio.
SS Obergruppenführer Paul Hausser, conversando con oficiales de la 2ª SS Das Reich
Tiger de la Das Reich encabezando el ataque hacia Prokhorovka. Julio de 1943.
-La batalla de Prokhorovka
El día 12 sobre el campo de batalla de Prokhorovka, el II SS Cuerpo Panzer de Hausser, abarcaba un frente de unas 9 millas de ancho, con la Totenkopf en el flanco izquierdo, la Leibstandarte en el centro y la Das Reich en el flanco derecho. Los blindados de la Totenkopf fueron empleados en una cabeza de puente sobre río Psel y en acciones defensivas contra ataque soviéticos. La Leibstandarte avanzó sobre el corredor oeste de la población de Prokhorovka después de haber rechazado los primeros ataques soviéticos.
Aún hoy en día las cifras sobre la potencia de ambos contendientes sobre el escenario de Prokhorovka es bastante confuso. Las cifras más creíbles nos hablan que el II SS Cuerpo Panzer SS tuviera aproximadamente en Prokhorovka unos 300 carros y cañones de asalto (170 entre las divisiones Leibstandarte y Das Reich, el resto con la Totenkopf, que estaba en el flanco izquierdo sobre el Psel). Por la parte soviética el 5º Ejército de Carros de Rotmistrov solo pudo poner en batalla alrededor de 500 carros de combate y cañones autopropulsados (616 si contamos el 5º Cuerpo Mecanizado de la Guardia, al norte del Psel).
Las descomunales cifras que nos hablan que en el campo de batalla de Prokhorovka había entre 1200 y 1500 carros de combate y cañones de asalto entre ambos bandos no son correctas. Estas cifras serían aplicables al día de 5 de Julio comienzo de la ofensiva, en las que las fuerzas de ambos bandos en el flanco sur del saliente sumaban unos números muy parecidos.
Amanecía el día 12 cuando la visibilidad sobre el campo de batalla se vio oscurecida por algunos chubascos locales provenientes de un cielo con nubes plomizas, traídas por un frío viento del este. De vez en cuando el sol asomaba, permitiendo a los observadores contemplar el terreno con una perspectiva más clara de lo que sería un limitado escenario de combate. Las unidades de la Leibstandarte informaron de un ensordecedor ruido de motores, lo cual indicada que se aproximaba una masiva concentración de carros soviéticos que se movían por Prokhorovka y sus alrededores en grupos de 40 o 50. Oleadas de T-34 y T-70 avanzaban sobre las posiciones alemanas en carga cerrada y gran velocidad. Cuando el fuego de ametralladoras, proyectiles perforantes y artillería comenzó a caer sobre los carros soviéticos, la infantería soviética saltó de los carros y buscó refugio. Los carros soviéticos que sobrevivieron al choque inicial con los blindados de la Leibstandarte y siguieron avanzando fueron destruidos o puestos fuera de combate. Pasado este enfrentamiento inicial los blindados de la Leibstandarte avanzaron sobre Prokhorovka, donde chocaron con elementos de la reserva blindada de Rotmistrov. Un ataque soviético realizado por el 181º Regimiento de Tanques fue derrotado por los 4 Tiger que quedaban en el regimiento Panzer de la Leibstandarte. La carga soviética sobre los Tiger en campo abierto, fue suicida. El blindaje frontal de los Tiger era impenetrable a gran distancia para los cañones de los T-34. No se perdió ningún Tiger, y el 181º Regimiento de Tanques fue prácticamente aniquilado. Al finalizar el día Rotmistrov empleó sus últimas reservas, elementos del 5º Cuerpo Mecanizado, que finalmente pararon a los carros de la Leibstandarte.
Algunos kilómetros al sudoeste de Prokhorovka, la Das Reich comenzó su ataque y entró en contacto con el 2º Cuerpo de Tanques y el 2º Cuerpo de Tanques de la Guardia. Durante todo el día una feroz y confusa lucha se desarrolló a lo largo de todo el eje del avance de la división alemana. Grupos de 20 a 40 tanques soviéticos, apoyados por infantería y aviones de ataque a tierra se enfrentaron a los elementos de vanguardia de la Das Reich. Rotmistrov, continuó enviando blindados contra la Das Reich y el combate continuó durante todo el día, con fuertes pérdidas de los blindados soviéticos. La Das Reich continuó avanzado lentamente hacia el este, avanzando durante la noche, sufriendo unas pérdidas de carros relativamente bajas.
En el flanco izquierdo, elementos del 1er Ejército de Tanques intentaron sin éxito aniquilar la cabeza de puente de Totenkopf sobre el rio Psel. Dicha división luchó duramente contra el 31º Cuerpo de Carros de la Guardia y el 33º Cuerpo de Fusileros de la Guardia. A pesar de los ataques soviéticos, los panzer de la Totenkopf avanzaron hacia una carretera que iba desde el pueblo de Kartaschevka, hasta Prokhorovka. Los combates caracterizados por la masiva pérdida de tanques soviéticos continuaron durante todo el día 12 de julio, sin un éxito definitivo por ambos bandos.
Los combates en torno a Prokhorovka se prolongaron durante varios días, quedando claro tanto para Hoth (que se econtraba presente en el campo de batalla) como Rotmistrov, que la llegada del III Cuerpo Panzer de Breith (Destacamento de Kempf) podría desequilibrar la situación.
En un golpe de mano sorpresa protagonizado por unidades del III Cuerpo Panzer en la noche del 11 al 12 de julio se consiguió tender un puente sobre el río Donets en Rzhavets, sin embargo en la tarde del 12 no se consiguió penetrar las defensas soviéticas que fueron enviadas para evitar el avance del Cuerpo Panzer. Finalmente el III Cuerpo Panzer consiguió atravesar la pantalla soviética el día siguiente.
Los combates siguieron produciéndose sin un claro vencedor. La Das Reich continuó avanzando lentamente hacia el este al sur de la ciudad hasta el 16 de julio. Dicho avance permitió el enlace entre esta unidad y el III Cuerpo Panzer de Breith el 14 de julio, y que ambas unidades rodearan a varias divisiones de fusileros soviéticas al sur de Prokhorovka. Por su parte la Totenkopf en la carretera Kartaschevka-Prokhorovka avanzó y consiguió tomar varias colinas al norte de Prokhorovka.
Sin embargo, estos pequeños logros no fueron explotados debido a las decisiones de Adolf Hitler. Tras recibir las noticias del desembarco angloamericano en Sicilia, así como de informes sobre inminentes ataques soviéticos sobre el río Mius, Hitler decidió cancelar la operación. En un último intento, Manstein solicitó a Hitler que se le permitiera acabar con los dos ejércitos de tanques soviéticos que permanecían en la zona.
Hitler no pudo ser persuadido por Manstein y en cambio, se dispersaron las divisones del II Cuerpo Panzer SS, repartiéndolas en otros sectores del frente para anticiparse a los ataques de diversión soviéticos al sur del sector Belgorod y Kharkov. En la noche del 17 al 18 de julio, las unidades del II Cuerpo Panzer SS se retiraron de sus posiciones en torno a Prokhorovka.
Las bajas aproximadas en carros de combate durante la batalla de Prokhorovka entre las formaciones alemanas fueron de unos 40 carros de combate y cañones de asalto definitivamente puestos fuera de combate. Otros muchos averiados pudieron ser srecuperados y reparadados en los talleres. Entre los soviéticos se perdieron aproximadamente unos 350 carros de combate y cañones de asalto entre el 12 y el 13 de julio.
De este modo se puso fin a la batalla de Prokhorovka y a la Operación Ciudadela (Zitadelle), no debido a las pérdidas alemanas (que fueron muy graves) sino a las diversas circunstacias que se dieron en otros sectores y frentes de la contienda.
Un cálculo aproximado de bajas humanas durante la Operación Ciudadela es el siguiente: 117.847 serían las bajas entre muertos, heridos y desaparecidos entre los Frentes soviéticos Central, Voronezh y de la Estepa. Las bajas alemanas entre el 5 y el 20 de Julio serían las siguientes: 20.720 hombres (entre muertos, heridos y desaparecidos) en el sector del 9º Ejército de Model (norte) y 29.102 hombres en el sector del 4º Ejército Panzer de Hoth y el Destacamento de Kempf (sur). Sumadas las bajas alemanas en los dos sectores hacen un total de 49.822 hombres.
Aún hoy en día las cifras sobre la potencia de ambos contendientes sobre el escenario de Prokhorovka es bastante confuso. Las cifras más creíbles nos hablan que el II SS Cuerpo Panzer SS tuviera aproximadamente en Prokhorovka unos 300 carros y cañones de asalto (170 entre las divisiones Leibstandarte y Das Reich, el resto con la Totenkopf, que estaba en el flanco izquierdo sobre el Psel). Por la parte soviética el 5º Ejército de Carros de Rotmistrov solo pudo poner en batalla alrededor de 500 carros de combate y cañones autopropulsados (616 si contamos el 5º Cuerpo Mecanizado de la Guardia, al norte del Psel).
Las descomunales cifras que nos hablan que en el campo de batalla de Prokhorovka había entre 1200 y 1500 carros de combate y cañones de asalto entre ambos bandos no son correctas. Estas cifras serían aplicables al día de 5 de Julio comienzo de la ofensiva, en las que las fuerzas de ambos bandos en el flanco sur del saliente sumaban unos números muy parecidos.
Amanecía el día 12 cuando la visibilidad sobre el campo de batalla se vio oscurecida por algunos chubascos locales provenientes de un cielo con nubes plomizas, traídas por un frío viento del este. De vez en cuando el sol asomaba, permitiendo a los observadores contemplar el terreno con una perspectiva más clara de lo que sería un limitado escenario de combate. Las unidades de la Leibstandarte informaron de un ensordecedor ruido de motores, lo cual indicada que se aproximaba una masiva concentración de carros soviéticos que se movían por Prokhorovka y sus alrededores en grupos de 40 o 50. Oleadas de T-34 y T-70 avanzaban sobre las posiciones alemanas en carga cerrada y gran velocidad. Cuando el fuego de ametralladoras, proyectiles perforantes y artillería comenzó a caer sobre los carros soviéticos, la infantería soviética saltó de los carros y buscó refugio. Los carros soviéticos que sobrevivieron al choque inicial con los blindados de la Leibstandarte y siguieron avanzando fueron destruidos o puestos fuera de combate. Pasado este enfrentamiento inicial los blindados de la Leibstandarte avanzaron sobre Prokhorovka, donde chocaron con elementos de la reserva blindada de Rotmistrov. Un ataque soviético realizado por el 181º Regimiento de Tanques fue derrotado por los 4 Tiger que quedaban en el regimiento Panzer de la Leibstandarte. La carga soviética sobre los Tiger en campo abierto, fue suicida. El blindaje frontal de los Tiger era impenetrable a gran distancia para los cañones de los T-34. No se perdió ningún Tiger, y el 181º Regimiento de Tanques fue prácticamente aniquilado. Al finalizar el día Rotmistrov empleó sus últimas reservas, elementos del 5º Cuerpo Mecanizado, que finalmente pararon a los carros de la Leibstandarte.
Algunos kilómetros al sudoeste de Prokhorovka, la Das Reich comenzó su ataque y entró en contacto con el 2º Cuerpo de Tanques y el 2º Cuerpo de Tanques de la Guardia. Durante todo el día una feroz y confusa lucha se desarrolló a lo largo de todo el eje del avance de la división alemana. Grupos de 20 a 40 tanques soviéticos, apoyados por infantería y aviones de ataque a tierra se enfrentaron a los elementos de vanguardia de la Das Reich. Rotmistrov, continuó enviando blindados contra la Das Reich y el combate continuó durante todo el día, con fuertes pérdidas de los blindados soviéticos. La Das Reich continuó avanzado lentamente hacia el este, avanzando durante la noche, sufriendo unas pérdidas de carros relativamente bajas.
En el flanco izquierdo, elementos del 1er Ejército de Tanques intentaron sin éxito aniquilar la cabeza de puente de Totenkopf sobre el rio Psel. Dicha división luchó duramente contra el 31º Cuerpo de Carros de la Guardia y el 33º Cuerpo de Fusileros de la Guardia. A pesar de los ataques soviéticos, los panzer de la Totenkopf avanzaron hacia una carretera que iba desde el pueblo de Kartaschevka, hasta Prokhorovka. Los combates caracterizados por la masiva pérdida de tanques soviéticos continuaron durante todo el día 12 de julio, sin un éxito definitivo por ambos bandos.
Los combates en torno a Prokhorovka se prolongaron durante varios días, quedando claro tanto para Hoth (que se econtraba presente en el campo de batalla) como Rotmistrov, que la llegada del III Cuerpo Panzer de Breith (Destacamento de Kempf) podría desequilibrar la situación.
En un golpe de mano sorpresa protagonizado por unidades del III Cuerpo Panzer en la noche del 11 al 12 de julio se consiguió tender un puente sobre el río Donets en Rzhavets, sin embargo en la tarde del 12 no se consiguió penetrar las defensas soviéticas que fueron enviadas para evitar el avance del Cuerpo Panzer. Finalmente el III Cuerpo Panzer consiguió atravesar la pantalla soviética el día siguiente.
Los combates siguieron produciéndose sin un claro vencedor. La Das Reich continuó avanzando lentamente hacia el este al sur de la ciudad hasta el 16 de julio. Dicho avance permitió el enlace entre esta unidad y el III Cuerpo Panzer de Breith el 14 de julio, y que ambas unidades rodearan a varias divisiones de fusileros soviéticas al sur de Prokhorovka. Por su parte la Totenkopf en la carretera Kartaschevka-Prokhorovka avanzó y consiguió tomar varias colinas al norte de Prokhorovka.
Sin embargo, estos pequeños logros no fueron explotados debido a las decisiones de Adolf Hitler. Tras recibir las noticias del desembarco angloamericano en Sicilia, así como de informes sobre inminentes ataques soviéticos sobre el río Mius, Hitler decidió cancelar la operación. En un último intento, Manstein solicitó a Hitler que se le permitiera acabar con los dos ejércitos de tanques soviéticos que permanecían en la zona.
Hitler no pudo ser persuadido por Manstein y en cambio, se dispersaron las divisones del II Cuerpo Panzer SS, repartiéndolas en otros sectores del frente para anticiparse a los ataques de diversión soviéticos al sur del sector Belgorod y Kharkov. En la noche del 17 al 18 de julio, las unidades del II Cuerpo Panzer SS se retiraron de sus posiciones en torno a Prokhorovka.
Las bajas aproximadas en carros de combate durante la batalla de Prokhorovka entre las formaciones alemanas fueron de unos 40 carros de combate y cañones de asalto definitivamente puestos fuera de combate. Otros muchos averiados pudieron ser srecuperados y reparadados en los talleres. Entre los soviéticos se perdieron aproximadamente unos 350 carros de combate y cañones de asalto entre el 12 y el 13 de julio.
De este modo se puso fin a la batalla de Prokhorovka y a la Operación Ciudadela (Zitadelle), no debido a las pérdidas alemanas (que fueron muy graves) sino a las diversas circunstacias que se dieron en otros sectores y frentes de la contienda.
Un cálculo aproximado de bajas humanas durante la Operación Ciudadela es el siguiente: 117.847 serían las bajas entre muertos, heridos y desaparecidos entre los Frentes soviéticos Central, Voronezh y de la Estepa. Las bajas alemanas entre el 5 y el 20 de Julio serían las siguientes: 20.720 hombres (entre muertos, heridos y desaparecidos) en el sector del 9º Ejército de Model (norte) y 29.102 hombres en el sector del 4º Ejército Panzer de Hoth y el Destacamento de Kempf (sur). Sumadas las bajas alemanas en los dos sectores hacen un total de 49.822 hombres.
Lanzallamas soviético en acción
Carro de asalto StuG III y granaderos de la Das Reich avanzando por la estepa durante la batalla de Kursk.
Tanques soviéticos T-34 listos para el combate. Julio 1943.
T-34 puesto fuera de combate durante la batalla de Prokhorovka.
6. Consecuencias. Balance de la batalla.
Tras detener la ofensiva alemana en el saliente de Kursk (Operación Zitadelle), los soviéticos emprendieron una doble contraofensiva contra el saliente de Orel en el norte (Operación Kutuzov) y sobre la zona de Belgorod y Kharkov en el sur (Operación Rumiantsev).
Tras el fracaso en Prokhorovka y el desembarco aliado en Sicilia, Hitler ordenó a los mariscales Von Kluge y Von Manstein presentarse en su Cuartel General de Rastenburg en Prusia Oriental. En apenas 12 días desde el comienzo de la Operación Zitadelle, la ofensiva se había estancado y los soviéticos habían lanzado sobre el saliente Orel una ofensiva general (Kutuzov), mientras en el flanco sur del saliente y la zona del Mius , los soviéticos también estaban dando muestras de movimientos para comenzar una nueva ofensiva.
Con todo este panorama, todavía Von Manstein seguía pensando que podía cortar el saliente si le otorgaban las últimas reservas acorazadas que quedaban en el Frente del Este. Sin embargo Hitler no quiso escucharle y para el día 24 de Julio, los alemanes habían perdido todo el terreno que tanto trabajo les había costado ganar en el saliente de Kursk.
A pesar de todo, en Kursk, el Ejército Rojo no había obtenido una victoria en el sentido convencional del término debido a que la Wehrmacht pudo llevar a cabo una retirada planificada y ordenada. Hitler había sufrido una derrota estratégica simplemente por el hecho de no saber vencer. Después de Kursk, el Heer fue empujado progresivamente hacia el oeste, mientras la moral soviética llegó a un punto muy alto.
La ofensiva sobre Kursk, se concibió como una apuesta, con la vana esperanza de obtener una decisiva victoria en el Este, antes que los angloamericanos desembarcaran en Europa.
Para el mando alemán, la situación después de Kursk fue casi peor que cuando la estabilización del frente en la primavera de 1943, después de Stalingrado y el Cáucaso. Casi todas las reservas se habían colocado en el sector de Kursk. Un gran número de elementos blindados y motorizados habían sido gravemente mermados o aniquilados y las bajas entre la infantería prácticamente irremplazables. La pérdida de casi 1000 aparatos por parte de la Luftwaffe fue también decisiva, con lo cual la superioridad en los cielos del Frente Oriental pasó indiscutiblemente a los soviéticos.
Para el Ejército Rojo, el coste humano en Kursk, fue elevadísimo, sin embargo a pesar de las pérdidas humanas, el Ejército Rojo llegó a aumentar sus fuerzas totales en 6.500.000 hombres, contando otros 500.000 en reserva. El hecho de que los soviéticos fueran los dueños y señores del campo de batalla tras Ciudadela les permitió recuperar y reparar gran parte de los carros que habían sido dañados en el campo de batalla. Así el 5 de Julio, había 3.000 tanques en el campo de batalla y el 13 de Julio se había disminuido hasta los 1.500. Sin embargo para el 3 de Agosto ya había de nuevo en circulación más de 2.700 tanques.
La batalla de Kursk, demostró que el Ejército Rojo podía enfrentarse a los mejores mandos y unidades del enemigo en su propio terreno, detenerlas en su marcha y hacerlas retroceder más allá de las posiciones originales anteriores a la batalla.
Tras el fracaso en Prokhorovka y el desembarco aliado en Sicilia, Hitler ordenó a los mariscales Von Kluge y Von Manstein presentarse en su Cuartel General de Rastenburg en Prusia Oriental. En apenas 12 días desde el comienzo de la Operación Zitadelle, la ofensiva se había estancado y los soviéticos habían lanzado sobre el saliente Orel una ofensiva general (Kutuzov), mientras en el flanco sur del saliente y la zona del Mius , los soviéticos también estaban dando muestras de movimientos para comenzar una nueva ofensiva.
Con todo este panorama, todavía Von Manstein seguía pensando que podía cortar el saliente si le otorgaban las últimas reservas acorazadas que quedaban en el Frente del Este. Sin embargo Hitler no quiso escucharle y para el día 24 de Julio, los alemanes habían perdido todo el terreno que tanto trabajo les había costado ganar en el saliente de Kursk.
A pesar de todo, en Kursk, el Ejército Rojo no había obtenido una victoria en el sentido convencional del término debido a que la Wehrmacht pudo llevar a cabo una retirada planificada y ordenada. Hitler había sufrido una derrota estratégica simplemente por el hecho de no saber vencer. Después de Kursk, el Heer fue empujado progresivamente hacia el oeste, mientras la moral soviética llegó a un punto muy alto.
La ofensiva sobre Kursk, se concibió como una apuesta, con la vana esperanza de obtener una decisiva victoria en el Este, antes que los angloamericanos desembarcaran en Europa.
Para el mando alemán, la situación después de Kursk fue casi peor que cuando la estabilización del frente en la primavera de 1943, después de Stalingrado y el Cáucaso. Casi todas las reservas se habían colocado en el sector de Kursk. Un gran número de elementos blindados y motorizados habían sido gravemente mermados o aniquilados y las bajas entre la infantería prácticamente irremplazables. La pérdida de casi 1000 aparatos por parte de la Luftwaffe fue también decisiva, con lo cual la superioridad en los cielos del Frente Oriental pasó indiscutiblemente a los soviéticos.
Para el Ejército Rojo, el coste humano en Kursk, fue elevadísimo, sin embargo a pesar de las pérdidas humanas, el Ejército Rojo llegó a aumentar sus fuerzas totales en 6.500.000 hombres, contando otros 500.000 en reserva. El hecho de que los soviéticos fueran los dueños y señores del campo de batalla tras Ciudadela les permitió recuperar y reparar gran parte de los carros que habían sido dañados en el campo de batalla. Así el 5 de Julio, había 3.000 tanques en el campo de batalla y el 13 de Julio se había disminuido hasta los 1.500. Sin embargo para el 3 de Agosto ya había de nuevo en circulación más de 2.700 tanques.
La batalla de Kursk, demostró que el Ejército Rojo podía enfrentarse a los mejores mandos y unidades del enemigo en su propio terreno, detenerlas en su marcha y hacerlas retroceder más allá de las posiciones originales anteriores a la batalla.
7. Galería fotográfica
T-34 soviético puesto fuera de combate por un Tiger I durante la batalla de Kursk.
Julio de 1943. Panzer IV camuflado, listo para el combate.
Granaderos panzer y carros de combate del II Cuerpo Panzer SS camino de Prokhorovka.
Infantería soviética en el campo de batalla
Equipo de cazacarros soviético, junto a dos Panzer III puestos fuera de combate. Uno de ellos va armado con el eficaz antitanque Degtyarev PTRD-41.
Dos carros soviéticos T-34 puestos fuera de combate.
Anticarro soviético de 76'2 mm en el sector de Orel. Julio 1943.
Julio de 1943. Tiger I del 505 schwere Panzer Abteilung en ruta hacia el frente.
Infantería alemana en el sector de Ponyri. 6-8 de Julio de 1943.
Panzer IV puesto fuera de combate en el sector norte del saliente. 8 de Julio de 1943.
Dos Panzer III de la 2ª Div. Panzer puestos fuera de combate en el sector de Ponyri. 12-15 Julio de 1943.
Columna de prisioneros soviéticos en el sur del saliente
Aeródromo soviético con cazas Yak preparados para el ataque.
Stuka alemán derribado por la aviación soviética.
T-34 soviéticos del 5º Ejército de Tanques de la Guardia de Rotmistrov, camino de Prokhorovka.
Granaderos del II Cuerpo Panzer SS el 9 de Julio de 1943. A la izquierda, prisioneros soviéticos.
Ingenieros de asalto alemanes armados con lanzallamas.
Unidades de la 6ª Div. Panzer camino de Prokhorovka. 11 de Julio de 1943.
Granaderos del Regimiento "Der Führer", de la División Das Reich en las afueras de Prokhorovka.
8. Fuentes
http://www.panzertruppen.org/ww2/1943/orderwehr.html
http://www.de1939a1945.com/descargas/kurskrevisado.pdf
http://es.wikipedia.org/wiki/Batalla_de ... n_Manstein
viewtopic.php?f=52&t=8108
http://www.panzertruppen.org/archivos/kursk/kursk3.html
http://www.gehm.es/segunda-guerra-mundi ... okhorovka/
-Panzergrenadierdivision "Grossdeutschland" an der Ostfront. Thomas Mc Guirl and Remy Spezzano.
-Waffen SS Soldier. 1940-1945. Bruce Quarrie.
-Kursk, encuentro de fuerzas acorazadas. Geoffrey Jukes.
-Images of Kursk. History's Greatest Tank Battle. July 1943. Nik Cornish.
-Kursk 1943. The tide turns in the East. Mark Healy.
-Erich von Manstein. Robert Forczyk.
-After de Battle nº 112
-Last victory in Russia. The SS PanzerKorps and Manstein's Kharkhov Conteroffensive. George M. Nipe.
-Kursk 1943. Vol. 1. M. Kolomyiec, M. Swirin.
-Steel Masters nº 117
-Tierra Calcinada. Paul Carell.
-Kursk 1943. La batalla decisiva. Álvaro Lozano.
-The battle for Kursk. David M. Glantz.
-Waffen SS Panzer Battles on Eastern Front. 1943-1945. Tim Ripley.
-Panzer Grenadier Division Grossdeutschland. horst Scheibert.
-Hitler versus Stalin. The WWII on the Eastern Front in photographs. John & Ljubica Erickson.
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