Los artefactos de la Guerra Civil que se desactivan en la actualidad
Día 10/08/2014 - 02.02h
A pesar de llevar más de 70 años enterrada, gran parte de esta munición todavía puede estar operativa
1 El Obús: Munición que puede permanecer en funcionamiento
Una de las armas de la Guerra Civil más encontradas son los obuses. Se trata de proyectiles disparados por piezas de artillería que pueden contener en su interior algún tipo de explosivo o, incluso, proyectiles sólidos. Suelen tener forma cilíndrica para conseguir mayor rendimiento aerodinámico.
En los últimos años se han producido varios hallazgos de este tipo de munición. Algunos, incluso, permanecían en funcionamiento en el momento de ser encontrados.
2 La granada de mano, un explosivo muy frecuente
Este artefacto cuenta con una gran cantidad de variedades y tipos. Es complicado clasificar las que se utilizaron en la Guerra Civil, ya que en ocasiones eran de fabricación casera o eran suministradas por países extranjeros.
De hecho, hace poco más de dos años, se encontraron dos granadas en Palencia que recibían el nombre de «Diablos Rojos» y que fueron una dotación del Ejército italiano del año 1935.
3 Las granadas de mortero: Otro tipo de proyectil
En este caso, las granadas de mortero se distinguen de los proyectiles de artillería en varios ámbitos, como el ángulo de su lanzamiento, la distancia recorrida o la velocidad. Este tipo de granadas también han sido desarrolladas y modificadas a lo largo de la historia.
En España se han encontrado enterradas en varias ocasions granadas de mortero de la clase Valero, que fueron utilizadas durante la este conflicto bélico.
4 Las minas antitanque necesitaban más peso para ser activadas
Este tipo de mina es un artefacto diseñado específicamente para inmovilizar o destruir vehículos del enemigo. En alguna ocasión se han encontrado ocultas o semiocultas, ya que normalmente este tipo de artillería se encontrada camuflada.
5 Las bombas de aviación son un material muy sensible
Este tipo de bombas se encuentra entre la artillería que más daño cuasaba al enemigo durante la Guerra Civil. En la actualidad han sido hallados varios tipos de estos explosivos, que suelen estar enterrados a una gran profundidad.
La Guardia Civil ha advertido en varias ocasiones del peligro que supone mover o manipular este tipo de artefactos, ya que, según la Benemérita, con el paso del tiempo su funcionamiento puede haber resultado dañado, por lo que esta artillería es capaz de explotar en cualquier momento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario