La Unión Europea impone nuevas sanciones al régimen sirio
Bruselas intenta asfixiar económicamente a Damasco con congelaciones de activos, prohibiciones comerciales y sanciones al Banco Central
EFE / El País Bruselas / Madrid27 FEB 2012 - 11:39
Los ministros de Exteriores británico (izquierda), francés (derecha) y holandés, en Bruselas. / GEORGES GOBET (AFP)
La Unión Europea (UE) ha aprobado hoy una nueva ronda de sanciones contra el régimen sirio que afectará entre otros al Banco Central, a siete ministros del Gobierno y al comercio de metales preciosos. Además, se prohibirán los vuelos de carga procedentes de Siria u operados por aerolíneas sirias, todo en un intento por estrangular las vías de financiación del régimen y forzarle a detener la violencia. Las nuevas medidas, que ya habían sido pactadas previamente, han sido aprobadas por los ministros de Exteriores europeos en un punto sin debate al inicio del encuentro que celebran hoy en Bruselas. Con ellas, siete miembros del Ejecutivo de Damasco verán sus activos en Europa bloqueados y tendrán prohibido entrar en suelo comunitario, castigos que ya sufrían cerca de un centenar de individuos considerados responsables de la represión en Siria.
Se congelarán, además, parcialmente los intereses y las transacciones del Banco Central del país, dejando una serie de excepciones para permitir el "comercio legítimo", según fuentes comunitarias. También con el objetivo de dificultar la financiación del Ejecutivo de Bachar Al Asad, Europa dejará de comerciar con oro y metales preciosos con las autoridades y vetará los vuelos de carga procedentes de Siria u operados por aerolíneas sirias. Sí se aceptarán los vuelos de pasajeros y los mixtos con el fin de permitir que los ciudadanos europeos que están en el país regresen a sus lugares de origen.
Los ministros de Exteriores, a su llegada al encuentro, han insistido en la necesidad de seguir aumentando la presión sobre el régimen sirio mientras no detenga la violencia. "Cuando vemos al presidente El Asad sonreír mientras vota en su referéndum, que es una mascarada siniestra, no podemos más que indignarnos porque las bombas siguen cayendo sobre Homs y otras ciudades", ha dicho el francés Alain Juppé.
También rechazó esa consulta organizada ayer por Damasco el ministro británico, William Hague, quien aseguró que el referéndum constitucional celebrado "no ha engañado a nadie", dado que "se han abierto los colegios electorales pero se sigue abriendo fuego contra los civiles". "El país no tienen ninguna credibilidad a ojos del mundo", enfatizó. Hague indicó que las nuevas sanciones de hoy "seguirán recortando las bazas del régimen (sirio) para financiarse", después del corte impuesto por la UE a las exportaciones petrolíferas de ese país en una ronda precedente.
Los ministros dejaron también claro que la opción militar está descartada en Siria y subrayaron la necesidad de hacer llegar ayuda humanitaria a la población. "No hay una solución militar a este conflicto. Sólo la opción política de seguir presionando, reforzando las sanciones, animando a la oposición a que esté unida", señaló el ministro de Asuntos Exteriores danés, Villy Sovndal.
Un día después del referéndum constitucional que el régimen sirio organizó para aplacar la revuelta. la violencia continúa imparable. El bombardeo de Homs es inclemente y la situación humanitaria empeora cada hora, según ha denunciado el lunes la Cruz Roja, que no puede organizar la evacuación de dos periodistas europeos heridos la semana pasada en esta ciudad, varios de cuyos barrios están asediados desde hace casi un mes. Los muertos se cuentan por decenas cada día en varias ciudades del país árabe.
Si la situación bélica no deja de agravarse en Homs, Idlib, Hama y Deraa, en el terreno diplomático, las cosas pitan también difíciles. El consenso en Naciones Unidas para abordar el conflicto sirio no parece viable a corto plazo. Y las acusaciones entre los países occidentales, por un lado, y China y Rusia, por otro, son cada día más crudas. Nadie ve una solución a corto plazo.
"El establishment gobernante está tan afianzado y tiene tantos intereses que, incluso si El Asad es derrocado, y esto es puramente especulativo, no está claro que su sucesor nos gustara mucho más", afirmó a Reuters bajo condición de anonimato un alto funcionario estadounidense. "No hay ningún heredero evidente", añadió. Entre los rebeldes tampoco está nada claro el panorama. "No hay una figura emergente que puede convertirse en el rostro de la resistencia siria, comentó el funcionario. La secretaria de Estado, Hillary Clinton, hizo el fin de semana un llamamiento a la deserción masiva de los militares, algo que parece todavía un poco prematuro. Con todo, el alto funcionario se muestra convencido de que "el punto de la ruptura llegará cuando exista una convergencia de presión internacional, diplomática y económica, y una efervescencia dentro de Siria que permita escribir en las paredes [el punto final] de El Asad". "No será fácil", agregó, "y llevará más tiempo". El director de la Inteligencia nacional de EE UU, James Clapper, incidió estar vigilantes sobre la "cohesión de las élites" gobernantes.
Siria es ahora uno de los principales campos donde batallan las potencias mundiales. Si los países occidentales abogan por la renuncia de Bachar el Asad, Rusia y China observan con creciente indignación las injerencias de las capitales occidentales en el conflicto sirio y las declaraciones de la secretaria de Estado. Clinton aseguró el viernes: "Están situándose no solo contra el pueblo sirio, sino también contra los alzamientos árabes". Y China ha reaccionado contundentemente. "Esto es totalmente inaceptable para nosotros", ha aseguró el lunes Hong Lei, portavoz del Ministerio de Exteriores chino. El Diario del Pueblo, dependiente del Partido Comunista Chino, ha ironizado sobre el "papel protector" de los pueblos árabes que Estados Unidos se ha arrogado. "El problema es qué fundamento moral tiene Estados Unidos para esta actitud arrogante", se escribe en el diario antes de recordar el desastre en que ha quedado Irak.
Nicolas Sarkozy, presidente francés, acaba de exigir que el autócrata sirio abandone el poder y calificó la muerte de dos periodistas (estadounidense y otro francés) la semana pasada de "asesinato" por el que deberá responder el régimen.
Fuente Diario "EL PAÍS"
Se congelarán, además, parcialmente los intereses y las transacciones del Banco Central del país, dejando una serie de excepciones para permitir el "comercio legítimo", según fuentes comunitarias. También con el objetivo de dificultar la financiación del Ejecutivo de Bachar Al Asad, Europa dejará de comerciar con oro y metales preciosos con las autoridades y vetará los vuelos de carga procedentes de Siria u operados por aerolíneas sirias. Sí se aceptarán los vuelos de pasajeros y los mixtos con el fin de permitir que los ciudadanos europeos que están en el país regresen a sus lugares de origen.
Los ministros de Exteriores, a su llegada al encuentro, han insistido en la necesidad de seguir aumentando la presión sobre el régimen sirio mientras no detenga la violencia. "Cuando vemos al presidente El Asad sonreír mientras vota en su referéndum, que es una mascarada siniestra, no podemos más que indignarnos porque las bombas siguen cayendo sobre Homs y otras ciudades", ha dicho el francés Alain Juppé.
También rechazó esa consulta organizada ayer por Damasco el ministro británico, William Hague, quien aseguró que el referéndum constitucional celebrado "no ha engañado a nadie", dado que "se han abierto los colegios electorales pero se sigue abriendo fuego contra los civiles". "El país no tienen ninguna credibilidad a ojos del mundo", enfatizó. Hague indicó que las nuevas sanciones de hoy "seguirán recortando las bazas del régimen (sirio) para financiarse", después del corte impuesto por la UE a las exportaciones petrolíferas de ese país en una ronda precedente.
"No hay una solución militar a este conflicto. Solo la opción política de seguir presionando, reforzando las sanciones, animando a la oposición a que esté unida", señala el ministro de Asuntos Exteriores danés, Villy Sovndal
Los ministros dejaron también claro que la opción militar está descartada en Siria y subrayaron la necesidad de hacer llegar ayuda humanitaria a la población. "No hay una solución militar a este conflicto. Sólo la opción política de seguir presionando, reforzando las sanciones, animando a la oposición a que esté unida", señaló el ministro de Asuntos Exteriores danés, Villy Sovndal.
Un día después del referéndum constitucional que el régimen sirio organizó para aplacar la revuelta. la violencia continúa imparable. El bombardeo de Homs es inclemente y la situación humanitaria empeora cada hora, según ha denunciado el lunes la Cruz Roja, que no puede organizar la evacuación de dos periodistas europeos heridos la semana pasada en esta ciudad, varios de cuyos barrios están asediados desde hace casi un mes. Los muertos se cuentan por decenas cada día en varias ciudades del país árabe.
Si la situación bélica no deja de agravarse en Homs, Idlib, Hama y Deraa, en el terreno diplomático, las cosas pitan también difíciles. El consenso en Naciones Unidas para abordar el conflicto sirio no parece viable a corto plazo. Y las acusaciones entre los países occidentales, por un lado, y China y Rusia, por otro, son cada día más crudas. Nadie ve una solución a corto plazo.
"El establishment gobernante está tan afianzado y tiene tantos intereses que, incluso si El Asad es derrocado, y esto es puramente especulativo, no está claro que su sucesor nos gustara mucho más", afirmó a Reuters bajo condición de anonimato un alto funcionario estadounidense. "No hay ningún heredero evidente", añadió. Entre los rebeldes tampoco está nada claro el panorama. "No hay una figura emergente que puede convertirse en el rostro de la resistencia siria, comentó el funcionario. La secretaria de Estado, Hillary Clinton, hizo el fin de semana un llamamiento a la deserción masiva de los militares, algo que parece todavía un poco prematuro. Con todo, el alto funcionario se muestra convencido de que "el punto de la ruptura llegará cuando exista una convergencia de presión internacional, diplomática y económica, y una efervescencia dentro de Siria que permita escribir en las paredes [el punto final] de El Asad". "No será fácil", agregó, "y llevará más tiempo". El director de la Inteligencia nacional de EE UU, James Clapper, incidió estar vigilantes sobre la "cohesión de las élites" gobernantes.
Siria es ahora uno de los principales campos donde batallan las potencias mundiales. Si los países occidentales abogan por la renuncia de Bachar el Asad, Rusia y China observan con creciente indignación las injerencias de las capitales occidentales en el conflicto sirio y las declaraciones de la secretaria de Estado. Clinton aseguró el viernes: "Están situándose no solo contra el pueblo sirio, sino también contra los alzamientos árabes". Y China ha reaccionado contundentemente. "Esto es totalmente inaceptable para nosotros", ha aseguró el lunes Hong Lei, portavoz del Ministerio de Exteriores chino. El Diario del Pueblo, dependiente del Partido Comunista Chino, ha ironizado sobre el "papel protector" de los pueblos árabes que Estados Unidos se ha arrogado. "El problema es qué fundamento moral tiene Estados Unidos para esta actitud arrogante", se escribe en el diario antes de recordar el desastre en que ha quedado Irak.
Nicolas Sarkozy, presidente francés, acaba de exigir que el autócrata sirio abandone el poder y calificó la muerte de dos periodistas (estadounidense y otro francés) la semana pasada de "asesinato" por el que deberá responder el régimen.
Fuente Diario "EL PAÍS"
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